La Junta de Andalucía ha concedido ayudas por valor de 495.180 euros al sector cárnico porcino de Málaga para paliar las consecuencias de la disminución de las exportaciones que el veto del mercado ruso está ocasionando en las empresas transformadoras.

El delegado del Gobierno andaluz, José Luis Ruiz Espejo, informó ayer de esta medida de apoyo al sector cárnico durante la entrega de las resoluciones de ayuda a la empresa cárnica Prolongo, junto al director general de Industrias y Cadena Agroalimentaria, Rafael Peral, y el delegado territorial de Agricultura, Javier Salas.

Estas ayudas, subrayó Ruiz Espejo, permiten a la empresa malagueña el almacenamiento privado de 900 toneladas en 2015 y de otras 820 toneladas de carne de porcino en 2016, una vez que la Unión Europea adoptó la decisión de iniciar el procedimiento de ayudas al almacenamiento de carne de porcino para paliar los desajustes que el veto del mercado ruso ha producido en el nivel de exportaciones del sector.

Este almacenamiento, previsto por la normativa de la Unión Europea para diversos productos agrícolas, ha sido establecido para el sector cárnico porcino ya que la pérdida de Rusia como mercado de exportación ha propiciado una disminución considerable del buen ritmo exportador de estos productos, incidió el delegado del Gobierno andaluz.

La pérdida del mercado ruso como destino exportador ha significado una presión continua de los precios superior a los periodos cíclicos normales de producción cárnica, de modo que los precios registrados han sido desde mediados de agosto de 2015 inferiores al umbral de referencia que establece la normativa europea.

Esta situación y su persistencia a lo largo del tiempo, explicó Ruiz Espejo, pueden perjudicar la estabilidad financiera de muchas explotaciones no sólo en Málaga, sino en todo el territorio del mercado común europeo.

El almacenamiento privado de productos porcinos y su retirada temporal del mercado se antoja por tanto necesaria para restablecer el equilibrio y aumentar los precios, recalcó el delegado del Gobierno.

Ruiz Espejo insistió en que con esta medida articulada desde la Unión Europea y ejecutada por la Junta de Andalucía con la «máxima celeridad, el Gobierno andaluz muestra una vez más su apoyo al sector agrícola y ganadero como uno de los principales motores de la economía en Málaga y en Andalucía».

Javier Salas explicó que las ayudas se destinan a la generación de proyectos de transformación, comercialización, agricultura ecológica y gestión de calidad y resaltó los 4,8 millones destinados a ayudas a la industria agroalimentaria que fueron concedidos a finales de 2015 a un total de 31 empresas y cooperativas del sector y que han posibilitado inversiones por valor de 11,6 millones de euros.