­Alameda vuelva a convertirse este fin de semana, por octavo año, en el espacio encargado de acoger FENCAZA 2016. Feria que se realiza de manera anual y a nivel andaluz con el objetivo de ser «un punto de encuentro para el público en general y para los aficionados a la caza en particular», según explicó Antonio Gallardo, coorganizador. Por tanto, como dijo Gallardo «estamos abiertos a todo el mundo que quiera ver como es la caza del Siglo XXI».

FENCAZA localizada a la entrada del municipio reúne en tan solo 600 metros cuadrados de carpa todo lo que tiene que ver la caza: taxidermia, cetrería, pintura, fotografía, compra-venta de animales, y todo tipo de material cinegético.

La provincia de Málaga cuenta con más de 15 mil cazadores inscritos, el dato curioso reside en que casi el 80 por ciento corresponden a la zona de la comarca de Antequera debido en gran parte a la orografía del terreno y la plaga de jabalís que, según Gallardo, «merma todas las otras especies, no pudiendo cazarse otra cosa». Todos estos cazadores, para serlo, tienen que tener y haber pagado sus licencias de caza y de armas, después de haber pasado un curso y de haber aprobado un reconocimiento médico psicotécnico.

A pesar de la presencia del jabalí en esta zona se puede realizar caza mayor y menor, categorías diferenciadas en función del peso del animal, tal y como apuntó el cazador Juan González. Destacando él que para la mayor son necesarios tener unos permisos especiales. Teniendo en cuenta estas directrices, este cazador difirió las dos categorías así: la mayor englobaría a los jabalíes, venado, muflón, el zorro y la cabra montés. Del lado menor, estarían los conejos, la liebre y la perdiz roja (en declive).

Esta feria se realiza en una época en la que la caza tiene en ciertos entornos una connotación negativa. No obstante ante esta afirmación Emilio José Cabrera, directivo de la Asociación Juvenil de Cazadores Andaluces (JOCAN), aseguró que es porque «se habla sin conocimiento [€] tenemos que darle a conocer a la gente como es la caza en realidad y cuán necesaria es». Bajo esta idea crearon en septiembre JOCAN, asociación única a nivel andaluz y que tiene ya a más de 160 inscritos, dejando de lado a los simpatizantes de la caza que también pueden participar en las actividades que ellos organizan.

Es el desconocimiento, dice también Gallardo, la causa de esta idea negativa. La caza, según él, es «la mejor herramienta que hay para mantener el equilibrio del ecosistema. Los cazadores somos valedores del equilibrio: realizamos control de plagas; damos cobijo, comido y sustento a todas las especies, no solo a las que cazamos; aportamos alimento en las épocas de sequía, y arrendamos tierras para que críen». La caza, como zanjó el cetrero Modesto Alonso «empezó con el hombre y tiene que acabar con él», es decir, mientras haya hombres seguirá habiendo cacería.

Son estas ideas y valores las que se fomentan a través de la organización y desarrollo de ferias como ésta. Durante los días que dura, los aficionados y simpatizantes pueden disfrutar de todo tipo de actividades. En especial, mañana domingo tendrán lugar la exposición y venta de perros de caza, principalmente podencos; tiro virtual, una forma de conocer los distintas modalidades de caza y de plato de forma simulada; el tiro con carabina de aire comprimido sobre diana, y las exhibiciones de cetrería. Por su parte dentro de la carpa, pueden adquirirse perdices, piezas artísticas como las esculturas en madera de olivo de Diego Guerrero, o animales disecados como los de Taxidermia López, llevada por Joaquín y Ángel López, padre e hijo de Teba.

@maricarmensango