El siniestro ocurrió en la noche del jueves 16 de julio de 2009. Un camión de bomberos de Alhaurín de la Torre se dirigía a Álora a apagar un fuego. A medianoche, el camión volcó en el kilómetro 4 de la A-7077, sobre el puente que salva la vía del ferrocarril, muriendo en el acto Pedro Palomeque, de 43 años, un querido bombero muy respetado por todos sus compañeros. Otros dos resultaron heridos. El 29 de marzo pasado se celebró el juicio contra cuatro acusados, entre ellos un diputado provincial socialista, Cristóbal Guerrero, y tres de los antiguos responsables del Consorcio Provincial de Bomberos, por los delitos de homicidio imprudente, lesiones imprudentes y contra los derechos de los trabajadores. La familia del fallecido, cuyo hermano, Andrés Palomeque, ha escrito una carta enviada a este periódico, se queja de que durante el plenario se ha intentado culpar al fallecido de lo ocurrido.

El juicio ha tardado siete años y, según la familia, se ha anulado dos veces. «La Fiscalía estaba a nuestro lado; a la tercera, se celebra el juicio con la sorpresa de que la Fiscalía y un nuevo fiscal ya no están de acuerdo con nosotros», precisa el hermano del fenecido en relación a la posición de la acusación particular. De hecho, el ministerio público retiró la acusación de homicidio imprudente por este motivo.

«Pero lo más duro ha sido cómo han querido culpar a mi hermano, el bombero que iba a una emergencia, de que llevaba una velocidad excesiva: 65 kilómetros por hora en una vía de 50. Por desgracia, no recuerdan que el camión llevaba 700 kilos más de lo autorizado, el mal estado del camión y algunos preceptos más infringidos», razona el hermano. Entre esos preceptos a los que se refiere Andrés Palomeque estarían, según un informe de la Inspección de Trabajo publicado en mayo de 2011, que el automóvil no tenía cinturones de seguridad, entre otras cosas.

El entonces responsable de Salud Laboral de la Federación de Servicios a la Ciudadanía de CCOO Málaga, Juan Marcial, indicó en su momento que, en mayo de 2009, el sindicato denunció ante la Inspección de Trabajo las condiciones en materia de prevención de riesgos laborales en que se encontraban los parques y retenes del Consorcio Provincial de Bomberos.

«Quiero dirigirme a todos los bomberos, policías, guardias civiles, etcétera... para que cuando salgan a una emergencia piensen, en caso de accidente, que los culpables son ellos; entiendo que son profesionales, como lo era mi hermano, y a la hora de una salida no piensan en lo que pueda suceder. Espero que esta denuncia sirva para concienciar a algunas personas. Con eso nos damos por satisfechos», señala el hermano del fallecido en la carta, al tiempo que añade que la familia no quiere ser mal pensada y que todo lo que ocurre sucede porque uno de los acusados «es un diputado del Partido Socialista».