« El logro de los Dólmenes es un logro de toda Antequera y de todas sus gentes; desde los investigadores que han demostrado el carácter único y su relación ancestral con dos enclaves naturales excepcionales como la Peña de los Enamorados y El Torcal, hasta los vecinos que día a día viven con ilusión esta oportunidad histórica que estamos preparados para afrontar todos juntos». Con estas palabras, el alcalde de Antequera, Manuel Barón, quiso hacer ayer partícipe a toda la ciudad de la declaración de Patrimonio Mundial que el Sitio antequerano espera recibir esta semana.

Para el regidor, que admite estar muy ilusionado, la cita histórica que afronta la ciudad estos días en Estambul (Turquía,) donde está reunido el Comité de la Unesco que realizará su pronunciamiento definitivo, tiene tanta importancia «como en su época la tuvo la reconquista por parte del Infante Don Fernando de Aragón».

Además, está convencido que será «un punto de inflexión» que dotará a Antequera «de una vocación internacional de la que había ya dado muestras, pero que ahora se confirma».

Barón está muy satisfecho de que la candidatura haya «logrado recuperar, entre todos, el tiempo perdido a lo largo de tantos años» en el Conjunto Arqueológico, ya que en el pasado «sólo hubo declaración de intenciones, como ese malogrado intento de construir un Museo de la Prehistoria que deberá ser ahora remodelado en profundidad».

Aun así, se muestra optimista ante «un sueño que esperamos se convierta en una realidad palpable este fin de semana». «Sería un reconocimiento de excepción a todo el pueblo de Antequera y, en especial, a todas aquellas personas que, con sus descubrimientos e investigaciones han hecho posible el valor universal excepcional, desde los hermanos Viera descubriendo a principios del siglo XX dos de los dólmenes, hasta el propio Michael Hoskin, demostrando la relación ancestral entre monumentos megalíticos y enclaves naturales».

El munícipe también está convencido de todos los aspectos positivos que conllevaría la declaración de Patrimonio Mundial. Un «beneficio impagable e incomparable», gracias al desarrollo turístico, económico y social que va a experimentar Antequera y del que aseguró que «hemos comenzado a notar lo que puede llegar a suponer esa transformación y ese revulsivo» desde que comenzó hace un año la campaña «Piedra sobre Piedra».

Finalmente, Barón también quiso agradecer el esfuerzo conjunto de todas las administraciones que han trabajado «estos últimos cinco años» de forma decidida para lograr esta declaración de Patrimonio Mundial, primer enclave ubicado en la provincia.