­El director del Conjunto Arqueológico Dólmenes de Antequera, Bartolomé Ruiz, repasa las claves de la candidatura después de que el Sitio haya sido declarado Patrimonio Mundial de la Unesco. Destaca todo el trabajo realizado hasta conseguir el objetivo, explica las características que hacen especial al espacio monumental y se fija nuevas metas.

¿Cómo vivió el momento de la declaración de los Dólmenes como Patrimonio Mundial?

Con mucha emoción por las opiniones que vertieron los diferentes embajadores que componen el Comité de Patrimonio Mundial. Realizaron comentarios muy elogiosos para la candidatura y para todos los investigadores que han participado en su elaboración. Es un espaldarazo de la comunidad científica internacional al trabajo bien hecho por parte del equipo de investigadores del Conjunto Arqueológico.

Ha sido un proceso muy largo hasta conseguir el objetivo. ¿De dónde viene todo?

Ha sido largo y muy complejo, y se podría estructurar en dos fases. Una primera que arranca en el año 1986 con la visita del director general de la Unesco a Menga y que tiene un desarrollo en el 1997 con la elaboración de un primer expediente, siendo la entonces consejera de Cultura, Carmen Calvo, y la delegada provincial, Rosa Torres. Ese expediente elaborado por profesionales de la Universidad de Málaga y la consejería de Cultura no tuvo gran recorrido. La segunda fase arrancaría en 2010 con la visita al recinto de la doctora Nuria Sanz, un alto cargo de Unesco. Ella nos instó a elaborar la propuesta de la candidatura del Sitio de los Dólmenes de Antequera para llenar el espacio de la Europa continental que hasta ese momento estaba sin representación en la medida en que el epígrafe de lugares neolíticos megalíticos del Patrimonio Mundial tiene solo cuatro sitios inscritos y son insulares. El recorrido, en este caso, iría desde el 2010 hasta la cita de Estambul.

¿Cómo ha cambiado el Sitio a lo largo de los años?

El cambio fundamental ha sido el provocado por la investigación. Ahí es donde se han dado los grandes saltos cualitativos y cuantitativos en el Conjunto Arqueológico. Por ejemplo, la investigación del profesor Michael Hoskin ha sido determinante para cambiar la consideración y el reconocimiento de nuestro Sitio. Ha sido fundamental para la elaboración del Valor Universal Excepcional (VUE) de los Dólmenes. También ha sido importante la investigación de las universidades de Granada, Málaga, Sevilla, La Laguna o Alcalá de Henares.

¿En qué momento fuisteis conscientes de que los Dólmenes podrían ser Patrimonio Mundial?

Con la visita de la doctora Nuria Sanz en 2010. Ella nos preguntó qué formulación estábamos planteando para nuestra incorporación a la lista y nuestro planteamiento era paisajista. Pero nos dijo que sería conveniente la convocatoria de un seminario internacional organizado entre Unesco, Gobierno de España y Junta de Andalucía para reunir a los máximos responsables de los sitios megalíticos de todo el mundo. Y en 2011 las tres administraciones lo organizamos y eso sentó los objetivos de la candidatura, adoptando la idea de presentar la propuesta como un bien cultural en serie.

¿Cómo ha sido la relación con ICOMOS y la arqueóloga Margaret Gowen?

Ha sido magnífica. Gowen es una gran profesional y especialista en temas de megalitismo. Su estancia en Antequera y la elaboración de la evaluación ha sido determinante para nuestro ingreso en la lista de la Unesco. Y con el resto de los miembros de ICOMOS el encuentro ha sido muy breve.

¿Qué características reúne el Sitio para haber sido declarado como Patrimonio Mundial?

En el Neolítico, los grandes túmulos de Menga y Viera mantienen relaciones con el paisaje. En el caso de Viera con el sol y en el de Menga con un elemento terrestre, como es La Peña de los Enamorados. Así, 1.000 años más tarde, estas comunidades agrícolas y ganaderas de la Vega de Antequera construyeron otro gran monumento funerario orientando su eje hacia otro elemento terrestre de la zona, la sierra de El Torcal. Estas son las claves que conforman el Valor Universal Excepcional del Sitio.

¿Qué cambiará de ahora en adelante?

Habrá un apoyo especial de todas las administraciones concernidas en el Sitio. Habrá un compromiso por parte del Gobierno de España para llevar a cabo inversiones en tanto que somos Patrimonio Mundial y estamos bajo el paraguas del Ministerio de Educación, Cultura y Deporte. El Ministerio de Fomento tendrá que realizar el levantamiento de la vía férrea del tren Sevilla - Granada y su conversión en vía verde, lo que supondría la comunicación de 4 de los 5 elementos que componen el bien: Menga, Viera, El Romeral y La Peña de los Enamorados. La Junta de Andalucía adquirirá el compromiso de finalizar el Museo del Sitio, así como de llenar de contenido tanto el catálogo de puestos de trabajo como las inversiones y gastos corrientes de la institución del Conjunto Arqueológico, para dar respuesta al incremento de visitas que se va a producir tras incorporarnos a la lista de Patrimonio Mundial. Por su parte, la Diputación de Málaga creo que se va a comprometer en la intervención promovida por el Ayuntamiento para disminuir el impacto del Polígono Industrial. Finalmente, el Consistorio se ha comprometido con la Unesco a elaborar un Plan Especial de protección de la llamada zona de amortiguamiento.

También habrá un impacto importante en la economía.

Ya se está notando, pero cuando se consolide, se podría duplicar el número de visitas que hemos tenido en 2015. No sólo se va a notar en Antequera, sino en la provincia y en Andalucía.