­El informe técnico de la Brigada de Investigación de Incendios Forestales de Málaga (BIIF) ha determinado que la causa del fuego originado en el paraje de la Hoz de Marín, en el término municipal de Archidona, el pasado 9 de septiembre fue la propagación de la quema intencionada de un vehículo a la vegetación circundante.

Además, el autor de las llamas no hizo nada por intentar sofocar el incendio provocado en el interior de la furgoneta -de la marca Citroën Berlingo- según se desprende del propio documento elaborado por los expertos.

Asimismo, el autor del fuego realizó otras dos hogueras en la zona del inicio de las llamas: en una quemó objetos como sillas o mesas típicas de playa, y en otra prendió fuego al seguro del coche incendiado. Sin embargo, los tres agentes de Medio Ambiente encargados de la redacción del informe han descartado que estas últimas hogueras hubieran originado el incendio, concretando que el siniestro únicamente contó con un punto de propagación.

Durante la inspección de la zona de los hechos, los responsables de la BIIF encontraron la documentación de la persona implicada, así como restos de materiales rotos dispersos por todo el área cercana al vehículo: una linterna, un bote de spray aplastado, una revista o un extintor sin usar. También, a unos veinte metros de la furgoneta, localizarían los restos quemados de una escopeta.

De igual forma, los expertos de la Junta recogen en el informe que la parte trasera del coche impactó con una antigua barbacoa situada en la zona, para después chocar «con mucha fuerza» con el tronco del pino en el que se encontró empotrado. Todo ello antes de proceder al encendido de los otros dos focos mencionados anteriormente.

En el capó del coche, los agentes de Medio Ambiente observaron una piedra de gran tamaño que impactó contra el mismo con fuerza, además de otras seis en el interior del vehículo que fueron introducidas previamente al incendio, pues aparecieron calcinadas. En este sentido, antes del impacto contra el pino, el presunto autor del suceso le habría roto los cristales laterales, probablemente y según el informe técnico, desde adentro hacia afuera, pues los restos están en su mayoría en el exterior de la furgoneta.

Los incendios de este tipo, originados en un vehículo, generan un alto poder calorífico, suficiente para fundir materiales como aluminio y deformar el cristal. En este caso, se encontraron restos de líquidos como aceites del motor que pudieron propagar las llamas a la parte inferior a la que ocupaba el coche.

Esto unido a una probabilidad de ignición para el día en el que se desencadenó el fuego de un 60%, lo cual supone un riesgo alto, provocó que se produjera el siniestro, que se logró extinguir una semana más tarde.

Un vecino de Archidona de 41 años, se encuentra actualmente en prisión provisional sin fianza, como presunto autor del incendio.