La fecha prevista para la apertura de la cárcel de Archidona se acerca y siguen sin estar resueltos todos los problemas que aún rodean a la infraestructura. El Estado se encuentra ahora finalizando la redacción del proyecto para la construcción de una planta de ósmosis en la pedanía de Fuente del Fresno, donde se encuentra el pozo que podría abastecer de agua a la prisión, un suministro que todavía no está garantizado para el denominado Centro Penitenciario Málaga II.
Así, con la citada planta se podría potabilizar el agua que debe llegar hasta la prisión situada en la comarca de Antequera y que de momento es de mala calidad. Por ello, el Gobierno de la nación está acelerando los trámites, de tal forma que el proyecto de la nueva infraestructura a construir podría estar terminado en los próximos días.
Aunque se trata de un proceso necesario para la puesta en marcha de la cárcel, la alcaldesa de Archidona, Mercedes Montero (PSOE), duda que la prisión pueda abrir sus puertas en la fecha fijada por el secretario general de Instituciones Penitenciarias, Ángel Yuste, quien aseguró que lo haría entre los meses de junio y julio del presente año. «Entiendo que una obra de estas características se extenderá durante mínimo cinco o seis meses», recalcó la regidora.
Montero también explicó que la localidad no se verá influenciada ni perjudicada por la nueva planta de ósmosis en el pozo de Fuente del Fresno, pues el municipio no se abastece en la actualidad a través de ese caudal, al no ser potable.
Por su parte, el secretario de organización del PSOE de Málaga y diputado provincial, Cristóbal Fernández, se mostró crítico con el Ejecutivo central en una reciente visita al Centro Penitenciario Málaga II. «Es bastante curioso que cuatro años después de haber concluido el Gobierno de España las obras de la prisión, no puede abrirla porque ellos mismos no han garantizado el suministro de agua. El PP no ha hecho lo fundamental para abrir el centro y no han sido ágiles para resolver el trámite», indicó.
Paralelamente al proyecto de la planta de ósmosis, la Sociedad Estatal de Infraestructuras y Equipamientos Penitenciarios (SIEP) se encuentra desarrollando una serie de trabajos para la construcción de canalizaciones que vendrán a conectar la red municipal de abastecimiento de agua de Archidona con el centro penitenciario.
La idea del Estado era que la localidad fuera la que suministrara agua a la cárcel, pero la alcaldesa asegura que Archidona no puede abastecer, al menos a corto plazo, a la prisión. «No es que no queramos, es que no podemos. La población está preocupada porque en 2012 hubo problemas de falta de agua y ahora los niveles están casi igual que entonces. Primero tenemos que garantizar el suministro a los vecinos», manifestó la munícipe, que cree que el trasvase desde Iznájar podría ser la solución.
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