El diputado socialista Miguel Ángel Heredia reprochó ayer al ministro del Interior, Juan Ignacio Zoido, que el Gobierno mantenga «recluidos» en el centro penitenciario de Archidona a más de 500 inmigrantes. «No queremos ni campamentos ni cárceles con inmigrantes. Exigimos una atención digna y decente. Porque no han cometido ningún delito», dijo.

«Han metido a 519 personas en la cárcel que no han cometido ningún delito. Han incumplido las leyes de Extranjería, el reglamento de los Centros de Internamiento de Extranjeros (CIE) que ustedes aprobaron en 2014 y las sentencias del Tribunal Constitucional. Y han incumplido la normativa europea e internacional en materia de derechos humanos», denunció el diputado socialista en la sesión de control al Gobierno del pleno del Congreso de los Diputados.

Asimismo, Heredia hizo hincapié en que la de Archidona es «una cárcel donde no había agua potable; donde parece que han recluido a menores, según las ONG; donde falta limpieza; donde no hay atención médica adecuada; y donde el número de agentes de policía es insuficiente».

Ante estas acusaciones, el responsable de Interior apuntó que el país ha vivido una «situación excepcional» en la que ha recibido en tres días hasta 1.000 inmigrantes, por lo que decidió abrirse la prisión de Archidona para acogerlos, «tal y como permite el ordenamiento jurídico».

Así, defendió que esta situación es «legal», permitida tanto por la legislación europea, como por la española. Además, indicó que la decisión ha estado avalada por 7 jueces y la Fiscalía Superior del Tribunal de Andalucía.

Zoido recordó también que durante el gobierno socialista se crearon cinco de los siete CIE que existen en España y que durante la crisis de los cayucos «encerraron a los inmigrantes en cuarteles abandonados, comisarías de policía y campamentos».