El accidente del tren de Media Distancia que salió de Málaga a las 7.40 de la mañana y descarriló en el municipio sevillano de Arahal a las 10.10 horas con un balance de dos heridos graves y 35 leves, trae cola desde muy poco después de que se produjera el siniestro. La presidenta de la Junta de Andalucía, Susana Díaz, fue la primera en pedir explicaciones a través de las redes sociales al Administrador de Infraestructuras Ferroviarias (Adif) por reabrir la vía «en esas condiciones».

Las dudas de Díaz, que más tarde destacó ante los medios la gran cantidad de barro acumulado en ese punto de la vía, se basan en la suspensión temporal de la línea que Renfe anunció en sus redes sociales a las 8.20 entre las estaciones de El Sorbito y Arahal por las fuertes lluvias, afectando a las líneas Málaga-Sevilla y Sevilla-Almería, aunque Adif data la suspensión entre los puntos kilométricos 25+000 y 25+200 a las 7.45, cuando el tren accidentado acababa de salir de la capital. Según Renfe, la circulación se restableció a las 9.40 (Adif la registró a las 9.25) «con limitaciones de velocidad al paso» en esas estaciones afectadas mientras que a las 10.30, ya con el tren descarrilado, lanzó un tuit que hablaba de la interceptación de la vía entre las estaciones de El Sorbito y Arahal provocada por una «incidencia» por las fuertes lluvias. Unas precipitaciones históricas, por cierto. El medidor que la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir tiene en la zona de Guadaira-El Arahal registró 113 litros por metro cuadrado en apenas doce horas.

La «incidencia», localizada en el punto kilométrico 19+500, a unos seis kilómetros del tramo afectado a primera hora de la mañana, resultó ser un descarrilamiento con más de 30 heridos, dos de ellos graves. El accidente ofreció pronto imágenes de uno de los vagones semivolcado en medio de un olivar y unas vías con aspecto de plastilina que sugieren que el accidente pudo tener consecuencias de mayor calado. Los peor parados fueron un varón con fractura de pelvis y una mujer de avanzada edad que también presentaba fracturas. Ambos fueron trasladados al Hospital Virgen del Rocío de Sevilla.

¿Por qué siguió el tren su camino? El ministro de Fomento, Íñigo de la Serna, contrariado por las preguntas de la presidenta andaluza, señaló que antes de que el tren siguiera su marcha no existía ningún problema en el lugar en el que se produjo el accidente. Como prueba alegó que el convoy que minutos antes había pasado por ese punto en dirección hacia Málaga había circulado sin problemas. El desbordamiento del río, según el propio ministro, se produjo «con posterioridad» al paso de ese tren, razón por la que considera que no se pudo tomar ninguna decisión «para evitar que se hubiese producido el accidente». Por ello descartó las críticas de la presidenta de la Junta de Andalucía, a la que acusó de «utilizar política y partidistamente este accidente», en vez de ayudar a solucionar la atención a las personas afectadas y la investigación sobre el suceso. De la Serna insistió en que el tren anterior tuvo que detenerse por un problema de agua en la vía, pero no en el lugar del accidente: «ya había pasado esa zona y se había comprobado que no había afección». Añadió que el tramo inundado se reabrió con suficiente antelación, a las 9.25 horas, aunque Renfe hizo público ese restablecimiento 15 minutos antes.

Sin embargo, el testimonio de una pasajera del tren accidentado arroja más dudas al caso. Rosa Cañete, vecina de Torremolinos, aseguró a Efe que media hora antes de descarrilar avisaron a los pasajeros de que iban a hacer un transbordo por el mal estado de la vía, aunque luego continuaron con normalidad. Dijo que a las 9.45 el revisor avisó a los pasajeros de que se iba a realizar el transbordo en Arahal por el mal estado de la vía, «y 15 minutos después» les dijeron que no. «En ese momento nos extrañamos, porque pensamos que cómo era posible que en un cuarto de hora todo se hubiese solucionado, y poco después el vagón descarriló», aseguró Rosa.

Por otra parte, técnicos de Adif iniciaron a última hora de la tarde de ayer el arreglo del trazado ferroviario en el que descarriló el tren. Fuentes de Adif confirmaron que las labores de reposición de la vía, que se realizarán en turnos de 24 horas, durarán al menos cuatro días.