El sindicato Acaip ha denunciado un incremento de la conflictividad desde principios de este año en el centro penitenciario de Alhaurín de la Torre por lo que ha convocado una concentración este miércoles.

El último episodio ha tenido lugar este domingo, con un incidente grave en el módulo de aislamiento de la cárcel cuando un interno "atacó de forma sorpresiva a uno de los funcionarios de servicio".

Este interno, según ha informado el sindicato Acaip, está clasificado en el artículo 91.3 del Reglamento Penitenciario, reservado a internos extremadamente conflictivos. De hecho, han precisado que desde su entrada en prisión ha protagonizado "innumerables altercados".

Según el sindicato, el pasado domingo, "al regresar a la celda después de la salida al patio, aproximadamente a las 12.00 horas, este interno golpeó en la cara a uno de los funcionarios sin mediar palabra, lanzándolo al suelo, y golpeándolo en repetidas ocasiones por todo el cuerpo".

La rápida reacción de un compañero permitió reducir al interno "tras un duro forcejeo, debido al alto grado de agitación y violencia que presentaba".

El funcionario agredido fue atendido en primera instancia en la enfermería del centro y posteriormente en el servicio de urgencias del hospital. El interno fue trasladado al hospital para una valoración psiquiátrica.

Así, han valorado la profesionalidad de la plantilla de este centro penitenciario, "que con su buen hacer se enfrenta a una situación extremadamente complicada en la prisión, con una plantilla escasa y envejecida".

Sobrepoblación

Por su parte, el sindicato UGT-prisiones Málaga ha denunciado que las agresiones son continuas a manos de determinados internos conflictivos en el interior del Centro Penitenciario de Alhaurín.

Según UGT, en menos de una semana se han vuelto a repetir dos agresiones físicas a tres compañeros del área de vigilancia en el módulo siete-aislamiento.

"Este tipo de incidentes se está convirtiendo en algo habitual, contamos con compañeros que han resultado lesionados por parte de reclusos con fractura de tabique nasal y aún arrastran secuelas", afirman fuentes del sindicato.

UGT reconocer que Instituciones Penitenciarias ha implantado un Plan Específico de Actuación Frente a las Agresiones en Centros Penitenciarios que recoge medidas preventivas y proactivas para evitar agresiones a funcionarios o minimizar sus efectos si estas ya se han producido, "sin embargo la falta endémica de personal en el cárcel de Alhaurín conlleva que los empleados públicos penitenciarios estén más desprotegidos ante internos violentos".

Los dos últimos incidentes han tenido como protagonistas a reclusos subsaharianos jóvenes, corpulentos, muy conflictivos e inadaptados al régimen de convivencia de la prisión, la primera agresión se produjo el pasado 3 de marzo y la segunda el día 4.

Los empleados públicos del establecimiento penitenciario de Alhaurín exigen trabajar en condiciones seguras, denuncian que asumen diariamente una carga de trabajo que no es llevadera por el déficit de recursos humanos y afirman que están mal retribuidos, circunstancias estas que determinan que la plantilla de la prisión malacitana esté literalmente quemada.

Por ello, UGT-Prisiones exige más seguridad y un refuerzo de personal de 40 compañeros en todas las áreas: vigilancia interior, oficinas, área tratamental, sanitaria, área mixta, etcétera. UGT recuerda que el Centro Penitenciario de Alhaurín fue concebido para 900 reclusos y en la actualidad alberga más de 1225 internos, "por lo que es más que evidente ese elevado grado de sobreocupación".