No al tráfico de personas

Si todos nos pusiéramos de acuerdo, la compraventa de mujeres desaparecería del planeta. Pienso que la mayor parte de la sociedad está de acuerdo conmigo, pero no hacemos lo suficiente. Es importante manifestar nuestra opinión, denunciar si sabemos que a nuestro alrededor hay mujeres que están siendo obligadas a prostituirse.

Suelen venir de países extranjeros, tienen entre 20 y 30 años y muchas ni siquiera saben nuestro idioma. Llegan engatusadas con la oferta de un trabajo digno. Les quitan la documentación para que no puedan huir y viven encerradas en pisos, clubes o burdeles. Verdaderas cárceles. En caso de quedar embarazadas son obligadas a abortar. Si escapan, si hablan, tanto ellas como sus familiares están amenazados de muerte. Pasan de un traficante a otro, vendidas repetidas veces. Los beneficios de este negocio superan ya a la droga, oscilan entre 7 y 12 billones de dólares anuales.

Según la ONU, ésta es la esclavitud del siglo XXI. Cuatro millones de mujeres son vendidas cada año para ejercer la prostitución lejos de su país natal. Son obligadas por sus proxenetas a consumir alcohol y drogas. De acuerdo con datos policiales, han llegado a prostituirse a través de un familiar o un amigo que las ha engañado.

Existen diferentes asociaciones que luchan por esta noble causa. Pongamos, no nuestro granito de arena, sino nuestra gran piedra para combatir este delito.

Isabel Pavón Vergara

Málaga