Club Liberal de Málaga

Los liberales integrados en el Club Liberal de Málaga deseamos ratificar, en este momento histórico en el que abundan los motivos para la inquietud, nuestro compromiso con la libertad, la igualdad y la fraternidad, y reiteramos nuestro objeto de afianzar y desarrollar estos valores, que continúan vivos y vigentes, y que deseamos alcancen toda su potencialidad en España.

Propugnamos a través del Club Liberal de Málaga la libertad política, civil, individual, económica y de empresa, o lo que es lo mismo, el Estado de Derecho; la igualdad ciudadana, o lo que es lo mismo, la soberanía nacional; la fraternidad o, lo que es lo mismo, la solidaridad, la justicia social e igualdad de oportunidades.

Sobre los principios clásicos del liberalismo, el Club Liberal de Málaga afirma los nuevos principios cívicos para el presente y el futuro: la iniciativa individual como motor del progreso, la defensa de los consumidores y la competencia, la generación de la riqueza y del conocimiento, la mejora global del bienestar, la solidaridad, las causas humanitarias, el cuidado y la protección del medio ambiente, y la defensa de los derechos individuales y de la democracia.

Pero de los tres grandes principios citados, es a la libertad a la que corresponde la primacía. La libertad es el concepto central de todo nuestro planteamiento, pues es la libertad el derecho en el que se fundan todos los demás derechos. Un derecho que es condición de existencia de los derechos individuales y que se confunde casi con el derecho a la vida.

Hoy en día muchos desprecian la libertad, pocos subrayan su importancia y, los más, tienden a darla por supuesta. Incluso se dice actualmente que los valores en que se funda la libertad son muy insuficientes o que ya están superados.

Sorprende ver cómo muchas ideologías que se autodefinen progresistas sienten desprecio o indiferencia por la libertad. Y tampoco es sorpresa, sino auténtico motivo de alarma, ver cómo muchos de los que se autodefinen como progresistas; sienten una gran aversión a la libertad.

Muchos pretenden negar la libertad desde la invocación a los derechos de los pobres y oprimidos, como si limitar o eliminar la libertad sirviese para superar la pobreza y la opresión. Y también se sostiene que la libertad es escindible. Que es posible la libertad sin que exista libertad económica, libertad de empresa y de expresión, o que es posible la existencia de libertad en contextos de limitación o restricción de los derechos individuales.

El Club Liberal de Málaga denuncia todas esas actitudes que no son más que la forma actual de presentar el viejo rostro odioso del privilegio y de la desigualdad, y que sólo pretenden negar la libertad para afirmar los privilegios de algunos. Las realidades totalitarias que hemos conocido en los llamados países socialistas, en los regímenes nacionalistas del pasado siglo XX, o en las modernas teocracias islámicas, nos ponen ante los ojos la evidencia de que la libertad ha de protegerse para que exista, que no puede fraccionarse sin que perezca, que la falta de libertad significa siempre la miseria para la mayoría, además de la dictadura para todos, y que los únicos derechos y libertades que merecen ese nombre son los derechos individuales de los ciudadanos.

Rafael O´Donnell Gallego,

Málaga