En seis días, el próximo lunes, si existiera, haríamos cola en la farmacia para la píldora del día después. Va a hacer falta.

No se me ocurre un escenario bueno. Si el PP no consigue gobernar, a pesar de que gane, será un más de lo mismo y vuelta a los tiempos de la deuda histórica.

Si el PP tiene mayoría absoluta no sé qué será del PSOE en Malága o en Andalucía. Bueno, mucho peor no puede ir y aunque el cementerio está lleno de gente imprescindible, un contrapeso en forma de ideas socialistas parece necesario.

Un escenario que también es probable es que los diputados de PA y UPyD puedan hacer de partidos bisagra, ferretero nombre para expresar que puedan decidir quién tocará pelo de poder.

Parece que su aparente virginidad, en cuanto al poder regional se refiere, podría dar a estos partidos minoritarios un muy útil papel a la hora de buscar nuevo inquilino para el Palacio de San Telmo.

Puede que hasta lleguemos a un escenario en el que tengan todos los partidos que hablar y decidir conjuntamente qué es lo mejor para todos. Y así, que los periódicos hablen de lo bien que nos va a los ciudadanos y no de quiénes son los cargos de confianza del consejero de turno, un escenario en el que la calle sea de los ciudadanos sin banderas y sí con maneras, las buenas. Un escenario en el que dé igual que si Málaga, que si Sevilla, que si Córdoba. Un escenario en el que trabajar con y por tu ciudad sea motivo de orgullo más allá de los trecientos días de sol.

Definitivamente voy a ir buscando la farmacia porque me va a hacer falta la píldora del día después.