Málaga se mueve y no lo digo por el chirriar de los neumáticos de los coches en las calzadas del Centro, sino porque esta semana tenemos en Málaga un evento diferente a lo habitual, una reunión que nace de ese mundo virtual que son las redes sociales, pero que en el mundo real y para el mundo real quiere tratar temas de actualidad. Desde qué es eso de la nube en las empresas a talleres sobre marca personal o asuntos tan sencillos –pero a veces tan importantes– como conseguir fruta fresca en la oficina, a diario y por un módico precio.
El evento, que será el viernes en el Centro Cívico gracias a la colaboración de la Diputación de Málaga, se llama #Málagasemueve 2012, y consistirá en talleres sobre distintas disciplinas, presentaciones creativas al estilo de Pecha Kucha y exposiciones altamente difundidas gracias a las redes sociales. Lo curioso de Málaga se mueve es que se ha organizado rápida y generosamente con la ayuda y colaboración de diferentes empresas, escuelas de negocios y autónomos con el único fin de crear un evento para colaborar y dar a conocer nuevos productos y servicios y por qué no, nuevas formas de colaboración.
Por tanto, de algo tan simple como tiempo y talento se pueden generar estupendas oportunidades de negocio y nuevos modelos de colaboración.
Mientras hay gente que sólo se queja, y agentes sociales que vociferan costosos gritos unos a otros con nuestro dinero –además de mantenerse atrincherados en sus respectivos parapetos de los que sólo salen para decir el eslogan que le dicen que hoy toca– otra gente se mueve. Concretamente Málaga se mueve.
