Cierre de una sucursal bancaria

Hemos tenido noticias del cierre de la sucursal de Unicaja en la barriada de Carlinda, y quisiera exponer lo siguiente: ¿Han valorado la cantidad de gente que van a dejar sin su caja?, ya que, en su mayoría, son gente mayor, que vienen de barrios como La Milagrosa, San Alberto, Carlinda, Granja de Suárez, Florisol...

Esta gente tendrá que hacer uso de otra caja y tendrá que atravesar la avenida Valle Inclán, un vial con muchísimo tráfico y con mucho peligro. Como representante de la asociación de vecinos «Solidaridad» de Granja de Suárez vemos que hay gente que ve a las entidades bancarias «frías».

Nosotros pensamos que las entidades están dirigidas por personas, a esas personas nos dirigimos para decirles que no tomen la decisión de cerrar esta sucursal.

Antonio Baena VarelaAsociación de vecinos Solidaridad. Málaga

Demasiado gobierno

En la actualidad, adquirir o poseer propiedades como casas, fincas, coches, tener acciones o una cuenta en el banco nos convierte inmediatamente en acreedores y presos del Estado. Cualquier falta de pago en nuestros tributos o impuestos pone en marcha una maquinaria implacable. ¡Paga o te embargamos! No valen razones. Y podemos pasar de una riqueza aceptable a una miseria absoluta. Hemos dejado en manos del Estado demasiadas competencias: enseñanza, medicina, matrimonio, -casa y divorcio- , fuerzas armadas, religión o cualquier ideología; vacaciones, medios de comunicación forjadores de cualquier ideología; bancos, seguros, investigación, transportes… Todo lo maneja o mediatiza un monstruo formado por dos docenas de personas que pueden ser unos incompetentes ensoberbecidos. Resultado: Crisis actual, falta de libertades y nuevas formas de esclavitud y dominio. Tres bancos: Santander, Bilbao Vizcaya y la Caixa manejan el 70% del dinero de España. Bastaría que se derrumbe uno para que se tambaleen todos. Por lo menos el 50% deberían ser pequeños bancos y cajas. Con las grandes multinacionales están despareciendo las pequeñas industrias, comercios y fincas que hacían de muelle en caso de emergencia. En la actualidad, una bajada en la bolsa de Nueva York puede destruir las economías de cualquier nación Dejemos que manejen el dinero las personas particulares. Saben gastarlo, por la cuenta que les tiene, mejor que gobiernos que tiran con pólvora del rey. En igualdad de condiciones toda empresa en manos particulares es mucho más rentable, como la educación, que en manos de Estados «metomeentodo» con ejércitos de funcionarios afines, familiares o compañeros de partido. ¿Cortamos un poco? Quizá sea un buen momento.

Alejo Fernández PérezMálaga