La señal inconfundible del poder absoluto consiste en hacer ver que lo blanco es negro, y lograr que mucha gente se lo crea. Franco, que se alzó en armas contra la República, no se conformó con matar a los que no se habían alzado, sino que previamente los procesó y condenó por el delito de rebelión militar. Salvando las debidas distancias, el procesamiento del exempleado de la CIA Edward Snowden por espionaje responde al mismo modelo. Al obtener y mostrar al mundo los informes sobre un vasto programa dirigido a espiarnos a todos, Snowden hizo espionaje. A este paso no va a quedar más remedio que juzgar a los jueces que juzguen a Snowden por espionaje, y a la vez juzgar a los responsables del espionaje masivo mismo. Esas cosas, crear tribunales universales sin jurisdicción efectiva, las hacía Bertrand Russell, y al menos mitigaban la sensación de impotencia, tan nociva para la salud.