Carta abierta a los Reyes Magos

Queridos Reyes Magos:

Sí, ya sé que no soy una niña, pero sigo teniendo tantas ilusiones y esperando tanto que a veces me parece que aún os oigo en esa mágica noche de Reyes. No os voy a pedir juguetes, ni dinero, ni tan siquiera salud... os voy a pedir que dejéis caer sobre la Tierra una nube azul de amor y respeto.. amor y respeto a todos los seres vivos que la poblamos; que esa nube azul nos llene el alma de compresión hacia los menos favorecidos y de ternura y respeto a los animales. Os pido que no haya más animales maltratados, que desaparezcan las fiestas crueles donde la diversión es el dolor y la muerte de un animal asustado y aterrorizado. Os pido que las instituciones y los políticos se enteren de que muchos españoles no queremos ser cómplices de la tortura y del abandono, que respetar los derechos de los animales es respetarnos como seres humanos. Os pido que el abandono desaparezca, que no tema abrir la puerta del refugio y encontrarme una caja llena de cachorros abandonados o un animal que sus dueños abandonan porque les estorba. Os pido que los animalistas sigamos siendo fuertes y capaces de superar la apatía, la crueldad y la indiferencia con que se trata el maltrato animal. Os pido que no haya más perros atados de por vida, encadenados por un dueño cruel e injusto. Os pido que desaparezcan los circos de animales, donde animales que deberían estar libres y salvajes, pierdan su dignidad en juegos circenses, amaestrados a fuerza de miedo y dolor. Os pido que no vuelva a ver ponys en las ferias; ponys dando vueltas durante horas, aguantando el calor, la música y hasta las patadas que he visto darles en la feria de Málaga. Os pido que vengáis un día al refugio y miréis a los ojos de los casi setecientos animales que protegemos y me digáis si es justo que tengan que estar entre rejas por el abandono y el maltrato, que me digáis por qué siempre pagan ellos, cuando solo han dado amor y lealtad. Os pido que cuando un animal maltratado o abandonado cruce el Arco Iris, lo esperéis y lo llevéis a un lugar feliz y mágico, donde ya no sienta dolor ni miedo y corra feliz y libre. Reyes Magos de un Oriente lejano y mágico... guiados por una estrella mágica... haced magia y decidme que las generaciones que vengan serán respetuosos ante el dolor y el maltrato.

Muchas gracias.

Carmen Manzano Rodríguez

Pta. de la Sociedad Protectora de Animales y Plantas de Málaga