Mobile, Passau, Popayán y Zacatecas son ciudades hermanas de Málaga, que además mantiene incluso una relación preferencial en los últimos años con la ciudad china de Hangzhou. Están a miles de kilómetros pero, según figura en la web municipal, nos unen lazos culturales y proyectos comunes. Está claro que nos van las relaciones a distancia. Mucho más cómodas por otra parte en la medida que no implican mucho más que unas cuantas comunicaciones online al año y, si acaso, algún encuentro esporádico, con intercambio de dulces típicos y exhibición de banderas. Por no hablar de la ventaja de poder maquillar a gusto el perfil de la ciudad, no con el ánimo de mentir, sino simplemente de resultar más agradable a nuestros hermanos lejanos.

Mucho más difíciles son las relaciones con urbes tan cercanas como Sevilla. Pero, atentos, que la situación está a punto de cambiar. Adiós al «enfrentamiento, la indiferencia o el distanciamiento», como subrayó ayer el alcalde malagueño. El eje Málaga-Sevilla (en la capital hispalense suponemos que lo llamarán ‘Sevilla-Málaga’) está más cerca. Francisco de la Torre y Juan Espadas se reunieron ayer para crear un «proyecto común». Cada ayuntamiento tendrá un equipo de trabajo que propondrá experiencias compartidas en materia de turismo, asuntos sociales, movilidad o cultura, además de lo más importante, impulsar un «corredor económico» entre ambas ciudades. Es decir, que van a hablar para aprovechar lo bueno de una y de otra y sacar el máximo rendimiento. El diálogo sale a relucir una vez más en este nuevo mandato. La saludable costumbre de hablar, que debería ser lo normal, se impone como un feliz descubrimiento de nuestros próceres. Aunque, según De la Torre, la culpa de las anteriores tiranteces no es suya, ni de Espadas, ni de los anteriores alcaldes sevillanos. Tampoco de Málaga y los malagueños ni de Sevilla y los sevillanos. La culpa es sólo y exclusivamente de la Junta y su «fuerte centralismo». Un clásico del argumentario que De la Torre no está dispuesto a dejar de usar por muy buen rollo que tenga ahora con Sevilla.