¡Ay, Carmena, en que lío te has metido! Una web para desmentir las noticias de los medios de comunicación. Hay que ser bastante ingenuo para poner en marcha tal ocurrencia en el Madrid del siglo XXI, que forma parte de la Europa del siglo XXI. Meridional, por descontado; endeudada, por descontado; atacada por las carcomas del paro y la corrupción, ciertamente; pero europea de la Europa occidental. Y en la Europa occidental una política de comunicación que aspire a conseguir algo efectivo debe construirse desde el temeroso respeto a la preeminencia de los medios privados, esos que son propiedad de empresas que quieren hacer dinero. Y una política de comunicación que aspire a influir en los periodistas debe partir del temeroso respeto al orgullo de los profesionales. Temerosos respetos que no tienen porqué estar acompañados de ningún afecto; ni siquiera de ninguna buena valoración profesional. Simplemente, un gobierno municipal debe respetarlos con temor porque le pueden hacer mucho daño a poco que decidan ponerle la proa. Y abrir la web del desmentido permanente es poner la proa a los periodistas y a los medios. Es un «se van a enterar» que va a tener como réplica un «tu sí que te vas a enterar, listilla». Porque los medios se equivocan y los periodistas se equivocan, y a veces hacen algo peor que equivocarse, porque los ángeles moran en el cielo y en la Tierra imperan los humanos intereses. Pero no es precisamente desde las instituciones desde donde se pueden dar lecciones de rigor, neutralidad y objetividad informativas. Ni desde las instituciones ni desde los partidos. Por cada matiz inexacto que los examinadores municipales puedan encontrar en las informaciones de los medios, estos pueden encontrar decenas de inconsistencias, contradicciones e incluso falsedades en la comunicación/propaganda de los ayuntamientos y de los partidos que los gobiernan. No sabe Carmena dónde se ha metido. Para empezar, van a cribar los desmentidos de su web de versiones originales, y en cuanto encuentren un patinazo, lo van a divulgar a los cuatro vientos. «La web de los desmentidos miente», va a ser la jocosa idea. ¡Ay, Carmena, en que lío te has metido! ¿Nadie le habló a la alcaldesa del ordinario y vigente derecho a la amable rectificación? ¿Nadie le dijo aquello de la miel y la hiel? ¿Quién le aconseja tan mal? Madrid está en la Europa del siglo XXI, no en la Venezuela inmovilizada en el siglo pasado, el de los movimientos de masas con control político por medio del populismo.
