El Málaga CF se despedía el sábado de la gira por Sudamérica con sensaciones dispares. Empezó con dudas y con falta lógica de ritmo ante el Deportivo Calí en Colombia, para ver una mejor versión de los de Javi Gracia ante San Lorenzo en Argentina (estancia en la que no se han sentido cómodos por el trato recibido).

En ambos encuentros, el conjuntoalbiceleste acabó mordiendo el polvo, ante los cafeteros con derrota por 3-2, mientras con San Lorenzo se tuvo que decidir la contienda en la tanda de penaltis, donde Tissone erró su ya famoso lanzamiento a lo «Panenka». El Málaga se pudo quitar la espina en cuanto a resultados ante el Peñarol de Uruguay. Los malaguistas pisaron el mítico césped del Centenario para además derrotar con remontada incluida a los locales por 1-3, con Cop, Duda y Rosales como artilleros de un Málaga que fue quedarse con uno menos por expulsión de Recio y desplegar su mejor fútbol.

Pero además de fútbol, en la gira del Málaga hemos podido ver que la vida sigue en los despachos. Sergi Darder, al que se le asociaba a Oporto, incluso Milán, parece que va a tomar finalmente el carril de en medio y pondrá rumbo a tierras francesas para enrolarse en el Lyon. La operación hoy lunes puede ser ya un hecho, unos 10 millones de euros por el balear que oxigenan unas arcas que no parecen nunca estar en un estado óptimo.

Juanmi, los "Samus" y ahora Darder. El Málaga es cierto que parece haber movido rápido y bien ficha, el bloque conformado en principio no disgusta a la mayoría de aficionados que por cierto una vez más, están respaldando al equipo a modo de número de abonados. Se pueden entender además las ventas. ¿Qué equipo actualmente de la liga española no se ve obligado a vender para subsistir? Quizás, y esto es a título muy personal, el error esté en el eslogan que se está utilizando para la campaña de abonados: «El sentimiento nunca muere», porque visto lo visto, por quienes han ido haciendo las maletas en La Rosaleda, tiene precio. Y aquí ya nos metemos en dos cosas bien distintas: los sentimientos y el dinero. Aunque a veces vayan de la mano inevitablemente y más concretamente en el mundo del deporte.

El Málaga CF con Casado y Husillos a la cabeza están jugando al peligroso juego de catar melones. Algunos ya han salido rana, otros en cambio son apuesta ganadora, caso de la apuesta fuerte de este verano por Amrabat. Un juego peligroso que requiere de un conocimiento absoluto del mercado nacional e internacional y que, siendo sinceros, parece la única salida viable y factible al cierre total del grifo que tiene implantado el jeque Al Thani.

La afición del Málaga CF es fiel, se está demostrando en las taquillas, tiene muchas ganas de fútbol y es por eso que seguirá apoyando a su equipo y sus colores. El sentimiento nunca muere, cierto, pero tiene precio.