Ha cambiado la vida de todos, y en Málaga también. Es el Whatsapp, wassap para los amigos. Es un medio de comunicación de mensajes en el que la aparición de los grupos ha revolucionado la forma en que socialmente nos comportamos. Todo grupo tiene un administrador que suele ser el que más entiende de móviles y que crea el grupo y va agregando a los miembros. Hay quien se toma el cargo con mucha intensidad: considera que ser administrador de un grupo de wassap es toda una responsabilidad. Están los grupos de amigos que perduran en el tiempo y los grupos para un evento que suele ser el cumpleaños de un amigo, que casualmente se queda fuera del grupo pues se usa para prepararle alguna sorpresa y comprarle el regalo. Si en tu grupo de amigos baja el ritmo de mensajes es que estan hablando por el otro grupo, en el que no estás. Sin embargo si piensas eso todos los meses entonces eres el paranoico del grupo, ese que piensa que nunca se contestan sus mensajes a tiempo. Otro espécimen wassapero es el que nunca contesta a nada, ese que hay que mirar la lista del grupo de vez en cuando para cerciorarse que está dentro, es el voyeur del wassap. Un administrador, un paranoico, un voyeur y nos falta el reenviador, que nos pone al día de todos los memes que circulan por la red, videos, fotos trucadas y mensajes de coña. Con esos cuatro ya tenemos un grupo de wassap. También están los grupos serios para las cosas del colegio de los niños en los que en septiembre todo son buenas intenciones y al final solo sirve para echarle la culpa a los profesores de todo e intercambiar fotos de deberes, pero ojo hay que estar si quieres que inviten a tus niños a los cumpleaños. Una maravilla lo del wassap, hasta que salió el doble check azul y ahora saben que aunque no participo leo todo lo que escriben mis amigos.