Estimado alcalde: Málaga es una ciudad abierta a todos los ciudadanos, a los malagueños y a los que nos visitan y como bien sabemos, es una ciudad que por sus especiales características desarrolla parte de su actividad, principalmente en la vía pública.

Pues bien soy un ciudadano que le gusta estar en la calle y disfrutar de cualquier rincón de Málaga, en su centro o en cualquier barrio, y le envío este escrito porque como disfruto de nuestra querida Málaga a cualquier hora del día, me llama mucho la atención el ruido que sobre las 10 de la mañana, más o menos, estalla en la plaza de Uncibay.

Sobre esa hora, una de las terrazas de un conocido bar que se caracteriza por los colores blanquiazules del equipo de fútbol de nuestra ciudad, empieza a montarla, porque van sacando el mobiliario arrastrándolo, desde el local hasta la citada plaza, primero los parasoles, con sus correspondientes soportes metálicos, mesas banquetas, etc...

Al mismo tiempo que eso ocurre, otras terrazas proceden a montar también sus terrazas llevando el mobiliario en un pequeño carrito, no arrastrando el material y no molestando a los que en esos momentos estamos tomando café por los alrededores.

Y le pregunto, querido alcalde, no es posible que por medio de la concejalía responsable del Centro, o de la de Comercio, ejerciten el debido control para evitar tanto ruido y, sobre todo, para evitar que el terrazo de la calle sufra ningún tipo de deterioro y, sobre todo, no molestar a los pocos vecinos que quedan en el sector.