La idea de que la historia se repite es más verdad si «repetir» se usa en la 5ª acepción de la RAE: «venir a la boca el sabor de lo que se ha comido o bebido». Ángel González ironizó, sobre la de España, diciendo (Glosas a Heráclito) que nada permanece «menos la historia y la morcilla de mi tierra: se hacen las dos con sangre, se repiten». Ecos del pasado que llegan distorsionados a un tiempo distinto. Viene esto a cuento del conflicto en ciernes entra la Generalitat y el TC, que en cierto modo evoca al que tuvo la primera, en el verano anterior a la Revolución de Octubre de 1934, con el Tribunal de Garantías Constitucionales de la República, que había anulado una ley catalana sobre la reforma agraria. La Generalitat, tras esa anulación, volvió a aprobar una Ley idéntica. Soberanismo terco «avant la lettre». Cuidado con los efluvios de la historia, un animal tan rencoroso como viejo.