Políticos de pena

¿Por qué España tiene políticos, antiguos y nuevos, en el Congreso, que estan por sus propios apaños personales, por pena de los ciudadanos? Es mi parecer que todo deviene del incumplimiento de la Constitución, y de las leyes, por quien debiera haberlas cumplido, como demuestran corrupciones generalizadas, descubiertas en Andalucía, Cataluña, Madrid... La Justicia fue supeditada, en tiempos de Felipe González, por su politización. Los apaños, componendas, impunidades en Cataluña, por conseguir votos de nacionalistos en el Congreso, por el deterioro de los derechos ciudadanos. Ese deterioro es consecuencia del ascenso de los antisistema, la pérdida de confianza en el PSOE, y PSC, por sus componendas pronacionalistas, antisistema. También Mariano Rajoy ha dejado pasar varias oportunidades en su legislatura de gobernar con vigor: al cubrir políticas de derroches de nacionalistos instalados en entes y subvenciones, con dinero público a medios, por su proselitismo. Y, «porque el dinero público no es de nadie», que decía una ministra de Zapatero, por justificar sus dispendios: en aquellos años, en que el como sea fue máxima, y que parece van a volver. Hoy, algún juez ha afirmado que en casos generalizados de corrupción descubiertos hubo «asociación por delinquir»: por desviar dinero público, por porcentajes, fraudes. También hay en las instituciones gentes de dudoso cumplimiento de la ley de partidos. Rajoy, por no proceder a reformas electorales, por segundas vueltas, ha traído deterioro de convivencia, por las coaliciones de antisistema, en ayuntamientos. Que no es bueno el deterioro de convivencia, que nace de injusticias en aplicación de las leyes: porque los votantes ven, que la «proporcionalidad», en la Justicia, son «leyes del embudo», de diferente trato fiscal, educativo, de derechos. Según seas político, nacionalista, o no; o, estés en un territorio, u otro.

Antonio Morales PiMálaga