Llamas a Endesa y escuchas «en breves momentos le atenderemos» y pasan esos momentos y otros y otros y no nos atienden y se empecinan en volverte a repetir» en breves momentos le atenderemos» y es el teléfono de atención al cliente, que si llega a ser otro€ En general, qué mala atención al ciudadano, a ti buen lector y a mí, por parte de operadoras de telefonía, bancos, compañías de servicios públicos€ te hacen perder el tiempo, te enfadan, no resuelven€ una lucha diaria con monstruos anónimos en la distancia cada vez más metálicos -«si desea hablar con€ marque 1, si quiere contactar con€ marque 2, si lo que desea€»- y así. Lo mismo sucede con las impresoras que parecen programadas para imprimir en color como te descuides y no cliquees en la casilla del monocromo, caso de Epson. No solo de marcas vive el hombre, sino de la palabra del Señor.

Pasa como con la cultura que se ha hecho de izquierdas -y con ella nuestros hijos- a fuerza de plegarse la derecha a la superioridad moral de esa izquierda, que ni es izquierda ni nunca se le pareció, ¿cómo no van a multiplicarse los nuevos bárbaros podemitas si campan impunes por el prado nacional? ¿Se acuerdan de cuando rodeaban el Congreso?, ahora ya están dentro y a ver quién los saca. Hoy las víctimas, como dice Donna Leon, «son ignorantes del delito». Donna es ahora merecedora del Premio Pepe Carvalho. Su comisario Brunetti se empeña en que los malos se responsabilicen del daño que hacen. Como Rajoy, que no para de perseguirlos (es broma, claro).

Por eso se hace cada día más necesario que esta profesión empuñe las plumas como espadas y así la Asociación de la Prensa de Málaga se aprestan a iniciar los trabajos del Observatorio de la Profesión Periodística -con el apoyo de la Diputación (gracias, Elías) y ejecutado por la Fundación Madeca bajo la dirección del catedrático Bernardo Díaz Nosty-, que tanta falta hace saber qué nos pasa como proveer remedio a nuestros males porque en estos tiempos azarosos hacen falta teclados, micrófonos y cámaras que desvelen tanto crimen que nos rodea. Por cierto, que detienen ocho años después al presunto autor del asesinato de Lucía Garrido. Aquella finca, Los Naranjos, en Alhaurín de la Torre€ cómo me recuerda el crimen de Los Galindos. Tres muertos en apenas un año.

En Venezuela los investiga (a los podemitas) la Asamblea Nacional, ahora que hay mayoría opositora en el Parlamento, y acá sin noticias de Soraya Sáenz de Santamaría, que es quien dirige el CNI e imparte instrucciones al director -y secretario de Estado- Félix Sanz Roldán. Aparte de esas imágenes de individuos de Bildu, Podemos y CUP subiendo a un avión en dirección a Caracas, ¿qué más?, se preguntan estos días muchos en los bares.

Lo que no saben es que estos hombres y mujeres sí hacen su trabajo, y muy bien, pero el trabajo que les encargan, no otro, y lo que después hagan los que mandan con el fruto costoso de su esfuerzo ya es cosa de otros. Pese a todo, hay quienes laboran bien y con gusto, caso del bufete Cortés & Martín Almendro, -buenas Fátima, buenas Pedro- que recibirá el próximo 19 de febrero en el hotel Palace de Madrid el Premio de Ley 2016.

En estos pensamientos ando nublado cuando me topo con Juan Machio en el hotel Cervantes, en Torremolinos, ya en el grupo de no adscritos del Ayuntamiento de esta cada día más bella ciudad que ahora luce esculturas de Elena Laverón en su Plaza Costa del Sol. Ya es ex de Ciudadanos, degradado en combate por colocar a su cuñado en una empresa municipal. Pero no entrega el acta, se aferra a su fusil. No se refería a él precisamente Miguel de Cervantes, allá lejos, cuando escribía:

No hay otra cosa en la tierra más honrada ni de más provecho que servir a Dios primeramente y luego a su rey señor natural, especialmente en el ejercicio de las armas, por las cuales se alcanzan, si no más riquezas, a lo menos más honra que por las letras, como ya tengo dicho muchas veces; que puesto que han fundado más mayorazgos las letras que las armas, todavía llevan un no sé qué los de las armas a los de las letras, con un si se ve esplendor que se halla en ellos que les aventaja a todos.

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