Hay muchas maneras de faltar al respeto a los mayores, pero la peor es atribuir a sus años o a que están muy antiguos cualquier cosa que les ocurra. Un ejemplo es el de esos cinco delincuentes ingleses de avanzada edad (media de 70), que tras realizar un fastuoso robo de joyas de 18 millones hace casi un año fueron detenidos semanas después y ahora condenados a diversas penas. Explicación del tontorolo de la policía que los detuvo, seguramente un modernillo: «eran criminales analógicos operando en un mundo digital». Sin embargo al parecer la razón de su caída es que alguien encontró las bolsas con parte del botín que uno de ellos había escondido en la tumba de un familiar, un gesto gótico supermoderno. ¿Dirán también que era analógico Bernie Sanders (74), que está dando una soberana lección de juventud, cuando al final sea derrotado por Hillary (68), para enfrentarse a Trump (69)?