Como es habitual en él, Manel Fuentes irrumpió en el plató como si corriera del fuego, como si anunciara una catástrofe bíblica, a voces, dando alaridos, gesticulando, algo así como un potro desbocado que entra en tu casa dejándote ante dos opciones, o te tiras al mando y le bajas el volumen a la tele, o te tiras al mando, porque no puedes taparle la boca, y cambias de canal. Decía hace poco Paula Vázquez que le sentó muy mal que la echaran de Pekín Express, y de Fama, entonces en Mediaset, y que ve en el machismo rampante la razón de su expulsión. Sólo hay que ver, dice, el número de presentadores de entretenimiento frente al número de presentadoras. Pones Antena 3, continúa, y no hay mujeres. Arturo Valls tiene dos espacios, y Jorge Javier Vázquez, en Telecinco, 18. Y a los 40 estás liquidada. No le falta razón a Paula Vázquez, que recuerda que mujeres brillantes como Ana Morgade o Anna Simón son colaboradoras, sin más. Así que Manel Fuentes, con el que empezamos, se suma a la lista de presentadores de entretenimiento que suman varios programas. Ha dado muchas voces Manel desde que fue reportero de Caiga quien caiga hasta 1,2,3, hipnotízame, el especial de estas fiestas de primavera que emitió el miércoles Antena 3. ¿Más? Sin duda. La maquinaria de una cosa llamada Top Dance ya está en marcha, así que ya sé que la noche que lo emitan mi menda dará unos pingos sobre la pista de mi salón y saldrá cortando a la cama por muy Manel Fuentes que grite y por mucho Manel Fuentes que me haga cucamonas. En lo de la hipnosis de esta semana, a Manel le ayudó Jandro, de El hormiguero. Presentaban a los famosos, como se presentó Jesús ante el patíbulo, a Jeff Tousaaint, el hipnotizador. Me daba un poco de vergüenza ver en fila como corderitos, por unas cuentas monedas, seguro que más de las 30 por las que vendió Pedro al jefe de la banda cristiana, al orondo y nada apolíneo Alberto Chicote, al esquelético, nada apetecible, y siempre cargante Mario Vaquerizo, al campechano y molón David Bustamante, y así unos cuantos pringados más.

Tertulianos y Evangelio

El hipnotizador se ponía delante de los insurrectos, y con sólo tocarles la frente, zas, caían fulminados como el rayo que no cesa. Luego les ordenaba hacer cosas peregrinas bajo el poder de su poder. Y entonces descubrí que a mí me pasa otra cosa notable. Me hipnotizo sin un Jeff Tousaint que me maneje. Me pasa cada vez que oigo a Mariano Rajoy, el hombre que no mueve un músculo, pide sensatez, dígase arrastrando las eses como él lo hace, y cree que no hacer nada es hacer algo en política. Es difícil no caer, y derrumbarse sin fuerza en los músculos, si oyes a tu presi decir en público que «tenemos que fabricar máquinas que nos permitan seguir fabricando máquinas», quizá, pensará el prohombre, porque «somos sentimientos y tenemos seres humanos». Es muy grande este hipnotizador. Le pones a Anabel Alonso el tomo de las obras completas de las frases de Rajoy y no tiene que ir a 1, 2, 3, hipnotízame para caer muerta y rematada. Otra peña que no ha de acudir a hipnotizador alguno, porque lo tienen en casa, es la feligresía de 13tv, cadena que si durante el año expele efluvios como para aniquilarte de un tortazo ideológico de extremo centro católico, ahora, en estas fiestas de capirotes, inciensos, tambores, lagrimones, vírgenes dolorosas, cristos llagados, ceras y saetas, y tíos como castillos disfrazados con sayones y velos, o tapados con cucuruchos como la temible banda del Ku Klux Klan, han tirado la casa por la ventana y han llenado su parrilla de procesiones, misas, curas, obispos, velas, responsos, y mensajes de amor y fe, y caridad y esperanza para compensar a los ingenuos que creen que 13tv es una cadena blanca, de misa diaria y hora del ángelus, oh, dios, aparta de mí el cáliz de la hipocresía, y señala a los que te usan con mucha pompa y cinismo en vano. Tanta procesión y misa estos días en 13tv -y en Canal Sur, olé, qué arte tiene-, tanto incienso que llega al sofá de casa con la potencia de la mejor adormidera, no me hipnotiza tanto como para olvidar que 13tv es un fábrica ideológica de extrema derecha que se financia con dinero público, con el mío, con el suyo, a través del pastizal que da el Estado a sus dueños, que pastorean a la peña como un Jeff Toussaint con sotana, con una mano con la lumbre de sus tertulianos, y con la otra con el fuego del Evangelio. ¿Quién no se hipnotiza, chato?

300.000 euros

Hay otras fascinaciones hipnóticas. Cuento 1, 2, 3, y reto al más duro a no quedarse así, con los ojos como lagunas, si escuchas a Anne Igartiburu hablando en andaluz. Ella es vasca, y no está haciendo ningún personaje de Allí abajo, pero se enamoró y se casó con el director de orquesta granaíno Pablo Heras-Casado, como el vasco Aritz, de Gran Hermano, se lió con Han, el chino de Armilla. Bien. El matrimonio tiene un carmen con vistas a la Alhambra, y aunque a veces la señora -hola, corazones- pasea por Granada, me quedé hipnótico total escuchándola en el programa de Juan y Medio en Canal Sur, en Menuda noche, donde los protagonistas son los niños, al contrario del que hace a diario, La tarde, aquí y ahora, donde hipnotiza a los pensionistas andaluces buscándoles pareja, el muy celestino. Anne Igartiburu escuchó las preguntas de los nenes, y cuando fue a responder, ay la hostia, pareció decir el personaje de Joan Plazaola en la serie de Antena 3, ¿qué le ha pasado a esta tía, por qué habla así? Su andaluz era tan cerrado, tan sonoro, que un servidor, a su lado, parece hablando de Valladolid. Alguien tiene que decirle a la señora que en «Graná no hablamos asín». Y termino. Lo hago con un dato que ha revelado el Consejo de Informativos de TVE. Con la llegada del PP se creó lo que se conoce como «redacción paralela» -periodistas contratados a dedo que no son de la casa para mejor servir al partido y al Gobierno-. Sólo cuatro de sus máximos jefes se embolsan más de 300.000 euros. Yo por ese dinero ensalzo a unos y critico a otros, y sin hipnosis ni mariconadas.

La guindaPerlas y PP

Claro que sí, apoyo a IU, y a Alberto Garzón. Soy de Vallecas. ¿Qué esperas, que me ponga perlas y vote al PP? Lo dijo hace unos días Cristina Pedroche, recién llegada de tierras lejanas donde ha grabado otra edición de Pekín Express -lo emitirá La Sexta-. La vallecana respondía así, sin medias tintas, porque está harta, dice, de que la traten como imbécil, acostumbrada a insultos del tipo «guarra, zorra, foca, y gorda».