¿Qué quedará de Europa y sus principios después de la «crisis de los refugiados»? Bueno, no nos pongamos sublimes. Europa y sus naciones nunca han dado nada a cambio de nada, y han matado siempre muchísimo para defender lo que creen suyo. En cuanto a sus principios, son más bien finales: el resultado de pactos para evitar males mayores. El Estado del Bienestar se supone que plasmaría aquellos «principios», pero en realidad es la cristalización histórica de un acuerdo entre clases por el que los que más tienen dan algo, o bastante, para que no les quiten todo. La actual Unión es un largo y feliz armisticio para restañar la guerra más mortífera y cruel que conoce la humanidad. «Valores» y «principios», nadie se engañe, son la nata para adornar el pastel. Pronto le tocará a Europa pactar con los pobres del mundo para que éstos no la invadan. Lo acabará haciendo porque no le queda otra.