La ciudad enmarca unas nuevas vistas del puerto: dos de las cinco grúas de la terminal de contenedores iniciaron el lunes su travesía con un viento de Levante nada propicio hacia su destino valenciano. Esa imagen de ciencia ficción divisada desde toda la bahía -con estructuras asemejadas a grandes especímenes mecánicos- se transformó a la espera de la llegada de unos elevadores más multifuncionales.
Sin dejar este género, también conocido como literatura de anticipación, cuyos argumentos se hallan en supuestos logros científicos o técnicos los cuales podrían lograrse en el futuro, hoy se celebra la primera década del Día del Orgullo Friki. Cada 25 de mayo este colectivo conmemora desde 2006 el estreno de la película de George Lucas La Guerra de las Galaxias, coincidente con El Día de la Toalla en homenaje al escritor y guionista inglés Douglas Adams, autor de la famosa serie La Guía del autoestopista galáctico.
Friki, este término coloquial ha terminado siendo aceptado por el DRAE y en una de sus acepciones lo relaciona con «toda persona que practica desmesurada y obsesivamente una afición». En mayor o menor medida todos tenemos amigos o conocidos encuadrados en esta tendencia, la cual abarca una gran diversidad de aficiones: informática, ciencia, videojuegos, cómics, animación, libros, cine, ciencia ficción, terror o fantasía y se les distingue por ser poco sociables y aglutinarse en grupos con gustos similares. Algo parecido a lo que piensa Eduardo Zorrilla, portavoz de IU-Málaga para la Gente, del alcalde ante la aprobación inicial del proyecto de urbanización del problemático Hoyo de Esparteros, incumpliendo los acuerdos del pleno de la Corporación. De nuevo, el frikismo de nuestro regidor por su inclinación a desdecirse: otro conflicto cósmico.
