¿Tiene futuro el movimiento «sin maquillaje», en vanguardia de la lucha contra el sexismo y al que apoyan Salma Hayek y Penélope Cruz? Bueno, no sé. Si se trata de igualar, quizás tendría más éxito promover un movimiento «con maquillaje» para los hombres, liberándolos del proverbial prejuicio machista que hoy les coarta de acicalarse para no parecer afeminados. El afán de mejorar la propia apariencia forma parte de la naturaleza humana, y hoy se practica más que nunca y a mansalva, en carne viva a través de reposiciones y cirugías, o en efigie a través del photoshop. Y, en fin, nunca he creído que haya sexismo en la diferenciación de sexos, pues sin ella la vida sería mucho peor (de hecho no la habría), sino en el afán de supremacía de un sexo sobre otro y en la discriminación. Así que maquíllese cada uno/a o no lo haga, según gusto y sin temor alguno a pecar de sexismo.