SEMANA SANTA Y SILLAS DE CARRETERÍA

Estos días atrás, se ha hablado mucho de lo que sucedió en Semana Santa, de lo que se puede hacer o no, de las sillas de Carretería, y un sinfín de cosas.

Yo entiendo, por poner un ejemplo, que la persona que está desde el mediodía en Carretería para ver a la Legión, si se le pone alguien delante o le piden paso, no quiere quitarse (es lógico), pero de la misma manera que en los sitios oficiales hay pasos peatonales, en esa calle con tanta tradición, también debería haber algún paso peatonal regulado; las sillas no estorban, pero impiden pasar. Lo mismo sucede en la tribuna de los pobres, no hay paso oficial y nadie quiere moverse del sitio y muchas veces no tienes por donde pasar.

Este año, por poner un ejemplo, iba yo a casa de mi madre que vive en calle Compañía, no podía pasar por la tribuna de los pobres, porque estaba el Rocío, y cuando por fin lo consigo, han cambiado el itinerario y entraban por Puerta Nueva y Fajardo, más de lo mismo, y seguida venía la cofradía de las Penas, toda una odisea para llegar.

Si ocurre otra estampida o si tiene que ir alguna ambulancia, el problema está en los sitios con tradición. Todos están agolpados pero ningún sitio regulado para una salida, indistintamente de que haya sillas o no.

Soledad Aguirre PérezMálaga