Si has estado de paseo este verano por alguna de las diferentes localidades de la costa malagueña, habrás podido comprobar en tus propias carnes el crecimiento visible del turismo. Parece que sí, que la economía está volviendo a su «sitio», parece haber una vuelta al bullicio, al tráfico peatonal allá donde vayas, y al de vehículos ¡por supuesto! ¡Ay! qué bien sienta saber que de nuevo se recuperan los carteles de COMPLETO en los hoteles, comer a las 17h de la tarde en el chiringuito de la playa, salir de paseo al atardecer, rojita/o como un cangrejo, y tropezarte con unas mil millones de personas haciendo lo mismo que tú, comprobar cómo la gente recupera esos puestos de trabajo perdidos hace unos años (con sus contratos en regla, sus salarios decentes, etc.), ¡ups! perdón, creo que aquí me ha jugado una mala pasada la cabeza€ esta cabeza mía€

Si de verdad esto no es otra burbuja y el «crecimiento y recuperación» de la economía son «reales», ¿por qué siguen los números del paro bailando tan desmesuradamente? ¿Por qué la Unión Europea decidió destinar este año un 12% más que en el presupuesto anterior para apoyar a las personas más jóvenes frente al paro? ¿Qué estamos haciendo desde aquí, desde esta ciudad con un turismo efervescente que tendría que generar más empleo justo y de calidad? Sí, los números del paro han bajado, con la llegada del verano han bajado, incluso más que el año pasado, como siempre sucede, pero han bajado en número, en cantidad, ¿y en calidad? ¿Cómo es la calidad de esos puestos de trabajo generados desde este sistema injusto? ¿No deberíamos concentrarnos más en generar el bienestar de las personas? ¿Se consigue esto dando de alta de la seguridad a una persona a cuenta de 20h semanales (que en realidad desempeña 50h) y pagando un salario mensual ridículo de unos 400 euros (más algo bajo la manga)? Demasiadas preguntas, con respuestas (si es que las tienen) desalentadoras, me temo.

Seguir poniendo nuestro granito en esta lucha por conseguir un empleo más justo y digno es lo que nos queda, y no nos desespera. Trabajar con jóvenes, y para promover una mayor empleabilidad entre las personas jóvenes, es uno de los objetivos presentes en la ONGD malagueña PRODIVERSA-Progreso y Diversidad. Para que se generen, por un lado puestos de trabajo de mayor calidad (perdurabilidad, salario, condiciones, etc.), por otro, que las personas jóvenes se sientan motivadas y preparadas para enfrentarse a un mercado laboral, hoy en día agresivo y nada alentador. Proyectos como Re-engage!, financiado por la Unión Europea, el cual lidera desde Málaga Fundación Coremsa y en el que participamos junto con otras tres asociaciones de Grecia y Rumanía, nos ayudan a entender la situación desde una perspectiva más amplia y enriquecer así nuestro trabajo, compartiendo y desarrollando posibles herramientas de motivación personal enfocadas a la búsqueda de empleo para jóvenes. Un ejemplo más de cómo lo global y lo local se interconectan de una manera productiva y esperanzadora.