Cuenta nuestro periódico que el alcalde De la Torre va a encargar sondeos a la empresa Sigma Dos sobre Limasa. Es oír Sigma Dos y ponérsele a uno el cuerpo electoral, cachondón políticamente hablando. Sigma Dos es célebre en el mundo político y de las encuestas, suena a prestigio, a ciencia política, lo ha dicho Sigma Dos, el periódico trae hoy una encuesta sobre Sigma Dos, el partido tal o cual mantendría su número de escaños según Sigma Dos, y en ese plan. Lo que no sabe uno es si ya puestos, Sigma Dos le hará el trabajito a De la Torre de preguntar también por su gestión en general. O por la opinión que de él tienen los malagueños. Frente a la que profesan o profesarían sobre Elías Bendodo, por ejemplo. El PP hará encuestas electorales cuando se acerquen las elecciones municipales. Y ahí está la baza del alcalde: si sigue dando bien lo mismo vende cara su retirada o se resiste. Ya le dijo el otro día a José Antonio Sau en este diario, en leidísima entrevista, que los malagueños le dicen por la calle que siga. Supongo que también se lo dirán en casa. O no. En el único local cerrado donde seguro que no se lo dicen es en la sede del PP. El temporizador que marca el verano que viene, fecha mantra señalada como de designación del candidato a la alcaldía, es mirado a diario por los interesados como quien mira absorto el cuadro de una ninfa en pelotas o un damero o un jeroglífico egipcio que hubiera aparecido de repente en la pared del baño como una humedad.

Seguramente De la Torre no se presentará pero por el camino se divierte tocándole las narices al que apetece su puesto. Conforme pasa el tiempo y se va enrareciendo el clima político, abocándose cualquier acción de gobierno a las coaliciones o pactos, más claro se va viendo que sería De la Torre el que tendría más tirón de todos los militantes que en su partido son. El que diga que está anciano, que lo dicen, que se vaya de paseo con él. Pero que desayune fuerte. No es esto una defensa de De la Torre. Es una descripción de cierta realidad, nos ha cogido el día descriptivo, qué le vamos a hacer. Ah sí, Limasa. Se podrían ahorrar la pasta. Málaga está sucia. Da asco en algunas zonas. Hay aceras que no se baldean desde el bienio social-azañista a lo menos. Aunque parece que no es eso lo que se va a preguntar. Parece que las encuestas serán a propósito del grado de satisfacción. No de satisfacción con el delco o satisfacción de la indumentaria de su cuñado o de satisfacción sexual, sino de satisfacción con Limasa. Hay gente que no tiene ni idea, ni quiere, de lo que pasa en Cataluña o de como gira la tierra y van a preocuparse de Limasa. Que ni está ni se le espera.