Como torrijas, pestiños y borrachuelos, que ya los hay hasta elaborados con la tan saludable harina de espelta, la Semana Santa nos devuelve por estas fechas muy dulces tradiciones. En Marbella también empiezan ya a ser habituales las «raquetas de Cuaresma». Y es que en el ámbito deportivo, los días de pasión no son lo mismo sin una buena parrilla de partidos de tenis sobre la arena de Puente Romano.
La costumbre arrancó hace siete años. El tercer Andalucía Tennis Experience, impulsado por Turismo Andaluz, nos permitió a muchos aficionados poder disfrutar en las jornadas festivas del Jueves y el Viernes Santo de algunas de las mejores raquetas del tenis femenino mundial. La bielorrusa Victoria Azarenka, ganadora de aquella edición, compartió protagonismo con auténticos iconos internacionales como la serbia Ana Ivanovic.
La ciudad costasoleña tampoco defrauda este año. Los amantes del tenis ya se preparan para disfrutar de un evento de primer orden como es el Casino Admiral Trophy y algunas de los nombres propios del mañana en el escalafón masculino. De hecho, este torneo es valedero para el circuito ATP Challenger Tour. Del 24 al 31 de marzo mediarán sus raquetas en las pistas del club de tenis del Hotel Puente Romano personalidades emergentes del calibre del joven rinconero Alejandro Davidovich.
Este residente en Fuengirola, que no obstante había roto sus primeras raquetas en su localidad natal, La Cala del Moral, hizo historia el pasado verano sobre el verde del All England Club. A sus 19 años se convertía en el primer español que ganaba en el último medio siglo el torneo júnior de Wimbledon. Lo hizo frente al argentino Axel Geller que partía como gran favorito en todas las quinielas.
Marbella también servirá de privilegiado escenario para conocer la potencial maestría del australiano Alexei Popyrin, vigente campeón júnior sobre la mítica arena de Roland Garros. Este tenista también se sentirá como en casa, puesto que entrena desde hace seis años en la Costa del Sol. También fue noticia en España cuando se coronó como ganador en París, porque impidió que el alicantino Nicola Kuhn, de progenitor alemán y madre rusa, se convirtiera en el primer español que inscribiera su nombre como tal desde el triunfo del barcelonés Carlos Cuadrado en 2001.
El campeonato programado para la próxima Semana Santa tendrá además como embajador al también marbellí Adrián Menéndez, la décima raqueta en el ranking español actual. Con 50.000 dólares en premios, la lista completa de participantes no está aún cerrada.
Ayer, la Federación Española de Tenis apuntaba que otro jugador de Marbella como el actual número 356 del mundo, Carlos Gómez Herrera, cedía en su primera final ATP Challenger. Fue en Santiago de Chile, donde el italiano Marco Cecchinato le remontó un primer set favorable. Participar ante su público seguro que le añadiría brillo al torneo que servirá para abrir el calendario europeo en tierra batida y la Semana de Pasión en el deporte provincial.
