La Semana Santa en Antequera dio comienzo ayer, Domingo de Ramos, con la cofradía de la Pollinica después de esperar durante más de treinta minutos a que el cielo diera una tregua en la nublada y gris tarde que se presentó. Finalmente, a las 18.30 horas salió por la puerta de la Iglesia de San Agustín el primero de los tres tronos que abren la jornada inaugural de la Semana de Pasión de Antequera.

El trono de Jesús a su Entrada a Jerusalén inició el Domingo de Ramos acompañado por más de un centenar de niños portando las tradicionales palmas. Esta imagen revive la acogida que los niños hebreos le dieron a Jesús cuando llegó a Jerusalén.

Puntual, a las 17.15 horas, comenzó el cortejo de la armadilla, un desfile que tiene por costumbre empezar en la casa del mayordomo, con todo el cuerpo procesional excepto las imágenes, hasta llegar a la iglesia donde recogen a los tronos para después salir. Seguidamente, y después de esperar dentro del templo durante más de media hora, abrió el cortejo la Banda de Cornetas y Tambores Los Romanos de Iznájar.

La imagen de Jesús a su Entrada en Jerusalén lucía este año vestimenta completamente nueva, con una túnica y mantolín de damasco morado, color insignia de la imagen donada por sus hermanacos y devotos. Al trono lo acompañaron cuatro personas vestidas con túnica.

Abel González, hermano mayor, dirigió este año de nuevo el trono, tarea que ya lleva realizando desde hace tres años con bastante éxito, por cierto.

Le seguía el segundo de los tronos, Jesús Orando en el Huerto, acompañado por una decena de penitentes que aguantaron expectantes la decisión final de la junta directiva de esta cofradía después de la leve llovizna caída en los minutos previos a la hora prevista de salida. Éste fue el único instante de duda, un momento que pasó rápido dado que el agua remitió.

Una de las principales novedades de este paso es la vestimenta que estrenó ayer de la imagen de Jesús, donada por su hermano mayor, Agustín Gómez, que esta Semana Santa cumple su segundo año desde el nombramiento.

Cerraba el desfile la Virgen de la Consolación y Esperanza, acompañada por la Asociación Musical Las Flores de Málaga, y escoltada por mujeres tocadas con la tradicional mantilla.

Al igual que el pasado año, las tres imágenes iban vestidas por el joven antequerano Adrián Sarmiento, reconocido fotógrafo en la ciudad y autor de diversos carteles relacionados con el mundo cofrade.