El Cristo de la Buena Muerte ya espera en el salón de trono de la plaza Fray Alonso Santo Tomás después de que, con rigurosa puntualidad, a las 10:30 horas desembarcara en el puerto de Málaga la compañía de Honores del Tercio Gran Capitán de la Legión. Desde allí, y tras recorrer a su característico ritmo de 160 pasos por minuto las calles del Centro de Málaga, los legionarios accedían a una explanada de Santo Domingo abarrotada de gente para efectuar el tradicional traslado del Cristo de Mena.
Numerosas personalidades, además del público que se amontonaba en los aledaños de la explanada, asistían a uno de los grandes actos de este Jueves Santo. En primera línea estaban el alcalde de Málaga, Francisco de la Torre; el presidente de Diputación, Elías Bendodo; el ministro de Justicia, Rafael Catalá -que ayer presidía el acto de liberación del preso de El Rico, en la plaza del Obispo-; el cardenal Fernando Sebastián; el almirante de la Flota, Santiago Bolívar; el delegado del Gobierno en Andalucía, Antonio Sanz; el secretario de Estado para la UE, Íñigo Méndez de Vigo; el presidente de Baleares, José Ramón Bauzá; el director general de la Policía, Ignacio Cosidó y, además, el actor Antonio Banderas, entre muchos otros.
Con la canción del legionario ha acabado un acto de traslado que no es más que el preludio de un gran Jueves Santo en Málaga.
