Lo primero, nazarenito, es felicitar a los compañeros de Onda Cero por crear el clima apropiado para que dos ex presidentes de la Agrupación de Cofradías de Semana Santa de Málaga y el actual se encuentren tan cómodos como para discutir como lo hicieron en el programa Al Hombro a cuenta de la tribuna oficial. Lo segundo, y ya que la refriega está en todos los mentideros cofrades, comentarla, porque hay tela que cortar. De un lado, Eduardo Pastor y Rafael Recio, expresidentes de las cofradías malagueñas; de otro, Pablo Atencia, el actual. El motivo: las quejas que ha suscitado entre algunos de los usuarios la nueva tribuna oficial, más baja que la anterior, lo que ha motivado que desde algunas zonas -incluidas las de prensa- no se vean bien o, directamente nada, las procesiones. Atencia pidió perdón en antena y dijo que la empresa se había comprometido a hacer una nueva tribuna con las mismas características que la anterior, dado que el montaje era muy caro. Se pidieron cuatro presupuestos y a una se le adjudicó. «Nos garantizaron que iba a ser perfecta», dijo Atencia. Y en las pruebas que hicieron se vio que el modelo era factible, pero Rafael Recio, Pipo para los amigos -allí parecía haber pocos-, sentenció: «Ellos serán mentirosos pero vosotros os lo creéis todo». Atencia respondió pidiendo por enésima vez perdón y aseguró que se van a exigir responsabilidades e, incluso, se estudiará indemnizar a los afectados.

En esas, Eduardo Pastor Dudi se quejó, mientras Atencia y Recio se enzarzaban, de que para entrar a la tribuna oficial había que pasar entre dos servicios. Y lo hizo varias veces. Atencia pidió lealtad a los dos expresidentes, criticó que esa crítica la hiciese Pastor en público y se quejó de que hay personas que «actúan con mala fe», para aclarar: «Que aquí han pasado muchas cosas y todos hemos ido a una». O: «Hay personas que aprovechan esta situación para meterle al presidente afectando a la imagen pública y al prestigio de la institución». O: «Cuando históricamente en la Agrupación han pasado situaciones como éstas y peores y todos hemos estado con el presidente». En fin, un cuadro flamenco. La pregunta está clara: ¿A qué situaciones peores que el diseño de una tribuna oficial se refirió Atencia? Alguien debería responder a lo de la ubicación de los servicios -ironía-.

Por cierto, ha habido muchas quejas de la curva de entrada a la Alameda Principal desde la calle Ordóñez. Al parecer, los grandes tronos tienen serias dificultades para pasar por ese enclave y les cuesta trazar esa maniobra. Las obras del metro ocupan más espacio del que debieran y a ello se añade la presencia constante de público en ese punto. Algunos de los tronos de ocho varales directamente han de girar sobre sí mismos, obligando a tirar de pericia a capataces y mayordomos. ¿Qué pasará el año que viene, cuando las obras del Metro se hayan tragado la Alameda entera? Será una buena oportunidad para arreglar lo de la tribuna oficial y meterle mano a un nuevo itinerario oficial, algo que está en la mente de todos los cofrades y en lo que ya se está trabajando seriamente. Hay ideas, proyectos, esbozos... A ver si todo llega a buen puerto y prevalece la cordialidad.