La archicofradía de la Expiración acordó el pasado lunes cambiar el recorrido de vuelta, que dejará de discurrir por la inhóspita Alameda Principal durante la madrugada del Jueves Santo, cambiando ese escenario por las calles Martínez, Atarazanas y Prim, más estrechas y acogedoras, y cruzando el río Guadalmedina por el puente de la Esperanza.
El hermano mayor de la Expiración, Miguel Alfonso Gutiérrez, explicó que los hermanos avalaron este cambio el pasado lunes en el cabildo de la archicofradías y que en los próximos días se informará a la Agrupación de Cofradías. No obstante, señaló que no supondrá un cambio sustancial en el horario de la procesión «que seguirá prácticamente igual, aunque se acorta algo el recorrido, pero muy poco».
Miguel Alfonso Gutiérrez apuntó que para la archicofradía se hacía muy dura la vuelta de la Alameda, por donde discurrían en el regreso «completamente solos, porque la gente se iba directamente a esperar al encierro». Además, el paso de la procesión se hacía más penoso por encontrarse con las calles «mojadas y llenas de charcos» tras la limpieza que hace Limasa de la calle tras el paso de las procesiones.
El nuevo recorrido está pensado para evitar la Alameda, muy amplia y fría, optando por las calles paralelas, que son más estrechas y que acompañan mucho más el paso de la procesión. Así, el cortejo de la Expiración seguirá regresando por la calle Strachan hacia la calle Larios, como hasta ahora.
Una vez que llega al final de esta vía, en vez de continuar hasta la rotonda del Marqués de Larios y volver por la Alameda, torcerá en la calle Martínez y continuará todo recto por Atarazanas y Prim, para cruzar el puente de la Esperanza y girar en dirección a su casa hermandad por el pasaje que hay entre los edificios de El Corte Inglés y Hacienda.
El objetivo es que el cortejo se sienta más acompañado durante el regreso y evitar la sensación de soledad que suele ser la tónica durante el último tramo de su itinerario y antes de llegar al encierro.
La hora del encierro se sigue manteniendo, con la llegada de la cruz guía a la plaza de San Pedro sobre las cinco de la madrugada.
Ampliación. El hermano mayor adelantó que el proyecto de ampliación de la casa hermandad, construyendo un nuevo ala en el solar que se sitúa a la espalda de la sede actual, se ha paralizado ante la situación de crisis económica. Además, apuntó que hay que hacer algunas modificaciones al proyecto.
Miguel Alfonso Gutiérrez indicó que el proyecto se retomará más adelante, cuando la situación económica se estabilice lo suficiente para acometer con solvencia este proyecto.
La ampliación prevista de la casa hermandad tendría cinco plantas subterráneas de aparcamientos, con 170 plazas, cuya venta permitiría financiar la obra. El resto del inmueble acogería las dependencias propias de la casa hermandad, trasladándolas desde la actual sede. De esta forma, los espacios liberados permitirían la ampliación del aula de música para los ensayos y formación de la banda de música. Además, se podría acondicionar parte del espacio como museo de la cofradía y ampliar el salón de tronos, para que estén con los varales puestos.
