El Niño de Elche regresa este sábado (21.30 horas) a Málaga. Lo hace 18 meses después de su última actuación en la capital. Entonces, Francisco Contreras Molina llegó al Auditorio Edgar Neville de la Diputación junto a Los Voluble para presentar RaVerdial, un espectáculo audiovisual realizado para el Festival Sónar de Barcelona que mezcla una rave underground con los verdiales. Con esta performance extendió la fiesta malagueña a los amantes de la electrónica y públicos que dificílmente hubiesen tenido contacto con este particular fandango malagueño.

En esta ocasión, el Niño de Elche aterriza en La Cochera Cabaret (avenida de los Guindos, 19) para presentar el disco que le ha valido el reconocimiento de la crítica especializada, además de ser reconocido con el Premio Ruido de 2015, concedido por la asociación de Periodistas Asociados Musicales: 'Voces del Extremo' (NDE/Telegrama, 2015). El artista ilicitano llega dentro de la programación de Momentos Alhambra, un ciclo de conciertos itinerante de la cervecera que reúne a nombres como Los Planetas, Lori Meyers, Estrella y Soleá Morente, Neuman, Exquirla, Maga o Lagartija Nick.

Conteras es un cantaor atípico que suma al cante la performance, la poesía, el rock, la experimentación, la electrónica o la canción de autor. Transgresor y experimental, su voz rezuma flamenco, aunque a él la tradición se la trae al pario. Niño precoz del mundo del cante, nunca encajó en esa ortodoxia. Demasiada rigidez por parte de los puristas, que le llevó por otros caminos. En esa indefinición, Contreras se siente más libre. Incorpora a su música estilos populares, anulando cualquier intento de clasificación. Y es que, como ha comentado en más de una ocasión, "las etiquetas muchas veces asfixian más que esclarecen".

Esta valentía creativa le ha llevado a sumar estilos -ya sea la electrónica, el 'krautrock' o el 'new wave'-, y a ser comparado con el proyecto emprendido hace más de 20 años por Enrique Morente en 'Omega' (Decca / Universal Spain, 1996), el disco que rompió el flamenco.

Por todo, el Niño de Elche es el cantaor preferido de los 'indies', convirtiéndose en uno de los nombres más destacados del nuevo flamenco, junto a Rocío Márquez, María Arnal, Soleá Morente o Rosalía, el último fenómeno de este flamenco 'hipster'. Precisamente, en los medios de especializados de la música independiente fue dónde el Niño de Elche encontró los mejores halagos, siendo el disco del año de 2015 para la revista 'Rockdelux'.

A la heterodoxia sonora, 'Voces del Extremo' suma letras comprometidas. De hecho, el título es una declaración de intenciones. Toma el nombre de la llamada poesía de la conciencia y del encuentro anual flamenco que se celebra desde 1999 en Palos de Moguer (Huelva). Los textos de este LP no son propios, son adaptaciones que hace de poetas como Bernardo Santos, Antonio Orihuela, Begoña Abad o Inma Luna. Letras que denuncian con crudeza y sarcasmo la voracidad del capitalismo. Su vocabulario está plagado de términos como crisis, empleo, privatizaciones, la bolsa, el comunismo. Tampoco sus títulos engañan a nadie. 'Canción del levantado', 'Mercados', 'Que os follen', 'El comunista' o 'Estrategias de distracción' son algunos de las canciones que este sábado sonarán en La Cochera Cabaret.

En Málaga, el Niño de Elche ofrecerá su cara más eléctrica. El precio de las entradas es de 12 euros (más 1,20 euros de gastos de gestión).

Fragmento de RaVerdial, del Niño de Elche y Los Voluble en el Auditorio Edgar Neville de Diputación, en abril de 2016