Acuario Teatro sigue celebrando sus 40 años en escena como mejor saben: haciendo disfrutar a los más pequeños de la casa. Traerán este fin de semana al Teatro Cánovas La Cenicienta, en que la compañía malagueña nos ofrece una historia llena de sentimientos; de bondad y de alegría. Todo ello contado a través de la música, el cuidado lenguaje y un uso de los recursos dramáticos adaptados para el público familiar. Sin duda, la edad no será una barrera a la hora de disfrutar de esta versión del tradicional cuento.

La historia que aquí se cuenta de Cenicienta tiene todos los ingredientes propios de un cuento de la época: envidias, orgullo, pasión..., Y frente a ello, el inocente candor de la protagonista que, ayudada por su hada madrina, conseguirá salir de la opresión y ver cumplidos sus sueños ¿metáfora o realidad? No lo sabrás hasta que no lo veas en el Cánovas.

Acuario Teatro se ha mantenido fiel a su estilo y su público ha hecho lo mismo con ellos. Bajo la dirección de su creador Diego Guzmán, la compañía surgió hace ocho lustros para dar respuesta a unas necesidades de una fundación sin ánimo de lucro. «Algunos amigos consideramos unirnos y hacer un teatro para niños. Nos convertimos, que yo sepa, en la primera compañía específicamente dedicada a los niños», asegura Guzmán.

Actualmente los miembros de Acuario son tres: Diego Guzmán, su hija Marta, y la esposa de él, Marisa Centeno. Acuario ha sido capaz de seguir existiendo pese al contexto, aunque también han tenido grandes momentos con obras dirigidas a público infantil y adulto.

'La Bella y la Bestia', un cuento para todos

Otro cuento imperecedero en la cartelera teatral malagueño. Hablamos de La bella y la bestia, a cargo de la compañía Jabetín Teatro, y que tendrá dos funciones en el Teatro Alameda, el 17 y el 24 de marzo.

En un reino muy,muy lejano una anciana mendiga llamó una noche de invierno a las puertas de palacio. El príncipe que en él vivía, altivo y egoísta, la echó sin darle cobijo ni alimento. Por tal malvada acción, la anciana, en realidad una gran hechicera, bajo un conjuro a todo el Palacio encantó. Al príncipe lo transformó en una vulgar Bestia, al ama de llaves , al mayordomo... en estatuas los convirtió. Tan solo una rosa mágica era el testigo del hechizo. En el pueblo, una chica dulce, Bella, vivía y un día persiguiendo al despistado de su padre a palacio llegó. Jabetín Teatro lleva a escena esta adaptación del cuento clásico (adaptado por la factoría Disney) con una excelente puesta en escena y un gran sentido del humor. A través de sus canciones toda la familia puede disfrutar de sus entrañables personajes viviendo, como dicen en Jabetín, «la magia del teatro».