David Amor acude el próximo jueves, día 3 de mayo (22.00 horas), al escenario de La Cochera Cabaret para participar en el ciclo de humor #Losjueves. El cómico gallego ofrecerá un divertido monólogo en el que desnuda sus emociones a modo de terapia y a golpe de retranca. Amor, que ha participado en la última edición del concurso Tu cara me suena, tranquiliza a sus seguidores asegurando que no cambiará el humor por la música. «Cantar nunca ha sido lo mío», confiesa.

Dice que se dejará llevar por la noche, pero díganos de qué hablará en su monólogo...

Sobre todo, hablo de mí. Aprovecho las actuaciones para hacer terapia y para reírme de mí mismo. Trato de contar lo que me pasa, lo que vivo, en clave de humor.

Vamos, que en vez de pagar por ir a terapia, cobra por ella.

Esa sí que es una buena definición. La verdad es que como se ponga de moda, los psicólogos me van a odiar.

Ahora que ha participado en Tu cara me suena, ¿ha descubierto su talento musical?

Es ese tipo de programas de televisión que me gustan: amable y familiar. Y lo pasamos muy bien, cosa que creo que también se ve al otro lado de la pantalla. Para mí ha sido un reto porque cantar nunca ha sido lo mío. No tenía pensado grabar un disco, pero esto lo confirma. La gente puede estar tranquila: seguiré haciendo lo que hago.

¿Deberíamos reírnos más de todo?

Deberíamos tomarnos la vida con más sentido del humor, estar más relajados y quedarnos solo con las cosas que nos suman. El resto, fuera. Hay que pensar si a veces le damos demasiada importancia a cosas que realmente no la tienen.

¿En el humor vale cualquier cosa?

Creo que se puede hacer humo de cualquier cosa. Solo hay humor bien hecho y humor mal hecho. También tienes que saber qué humor buscar y si no te interesa, pues no lo veas y punto. Pero hay mucha tontería con eso, y los medios a veces también crean un poco de psicosis y le da más importancia a unas cosas y menos a otras. Vivimos en una sociedad en la que pararse a pensar no está de moda. Por desgracia, estamos viviendo malos momentos para el humor por desgracia y parece que nadie le quiere poner freno.

¿Por qué lo dice?

Porque hay mucha gente imputada por hacer chistes y por tonterías así, y eso es censura pura y dura y quien no lo quiera ver tiene un problema. Vivimos en una sociedad enferma porque una cosa es el mal gusto y que sean chistes desafortunados, y yo puedo estar de acuerdo con esto, pero hasta ir a la cárcel hay una distancia muy grande.