El 13 de abril de 1865, Jueves Santo, se ponía por primera vez en la calle la cofradía de la Misericordia dispuesta a realizar estación de penitencia en la Catedral. Había sido fundada un año antes por un grupo de devotos percheleros en la hoy iglesia del Carmen, entonces propiedad del Ayuntamiento tras la exclaustración y conocida como la capilla de Torrijos, con la finalidad de dar culto a una imagen del Nazareno caído; venerada desde un siglo antes en la capilla del Sagrario de la iglesia del convento carmelita descalzo de San Andrés.

No era la primera vez que se procesionaba esta imagen, atribuida a los hermanos Mora y tradicionalmente a Pedro de Mena, ya que se tiene constancia que lo fuera en diversas ocasiones en rogativas, como la del 2 de mayo de 1860 para pedir por el fin de la epidemia de cólera que azotaba la ciudad y especialmente al barrio; junto con Jesús de la Misericordia procesionaron la Virgen del Carmen, de Jesús de la Columna y de Santa Teresa.

El itinerario seguido por la nueva cofradía en su primer Jueves Santo fue: calle del Carmen, pasillo de Santo Domingo, puente de Tetuán, centro de la Alameda, Puerta del Mar, Nueva, Plaza, Santa María, Catedral, San Agustín, Granada, plaza de Riego, Álamos, Torrijos, Compañía, Santos, San Juan, Plazuela del Mar, Alameda, puente de Tetuán, calle del Carmen y a su iglesia.

Compartió jornada con la Sangre y con el Nazareno de San Juan, que salió de Santo Tomás tras un traslado previo; llevando todas ellas bandas de música, piquetes de caballería y escolta de tropa.

Se destacó del cortejo de la Misericordia la uniformidad de todos los nazarenos, de veludillo morado, cinturón galoneado en oro, coronas de espinas y escudo en el pecho de plata o metal blanco. Entraron en la catedral con el mayor orden y sin problema alguno. A la vuelta hubo un invitado inesperado, la lluvia. La procesión se desorganizó y la imagen fue llevada para resguardarla a la iglesia de la Aurora del Espíritu Santo, que se encontraba situada en calle Álamos; sin embargo, apuntan las crónicas, al no poder entrar allí, introdujeron al Señor de la Misericordia en una casa próxima al Arco de Buenaventura.

A las otras dos cofradías les pilló el aguacero en Puerta Nueva, refugiando a la imagen de Jesús Nazareno en la Posada de San Rafael y al Cristo de la Sangre en el Café del Suizo. Una vez cesó la tormenta, el Señor de la Misericordia volvió al Carmen.

Salió en procesión los años siguientes hasta 1868, si bien sin hacer estación de penitencia en la Catedral, decayendo desde dicho año sus cultos públicos, no así su actividad como mutualidad de entierro. En la última mitad del siglo XIX solo realizó su desfile procesional en 1886, 1887 y 1894.

Por aquellos años ya se le conocía como El Chiquito, y ello se constata en que así se le refiere en diversas Guías de Málaga. Concretamente, el primer texto que emplea dicho apelativo es la guía correspondiente a 1894, de Nicolás Muñoz Cerisola; pero curiosamente no para referirse al Nazareno caído sino a una pequeña efigie del Señor de la Misericordia que se encontraba a la entrada de la puerta principal del templo y se cree, indica el autor, sirvió de modelo para la talla de la imagen titular.

En la Semana Santa de 1918 volvieron a realizar salida procesional; llevando al Señor en 1923 y 1924 sobre un trono de carrete que causaba la admiración de malagueños y visitantes.

Tras la Guerra Civil, y destruida la imagen titular, los cofrades dispusieron desde 1940 de una talla cedida por las monjas del convento de la Encarnación de la orden cisterciense, similar a la desaparecida. Las monjas no querían desprenderse de la imagen ya que tenía fama de milagrosa, sobre todo por un hecho acaecido los primeros días de la guerra en el intento fallido de ser destruida. Pero los cofrades persistieron en el empeño de volver a rendirle culto a una imagen de su propiedad, de recuperar al Chiquito. En marzo de 1942 se abrió una suscripción especial para recaudar fondos con tal fin, nombrándose una comisión especial para el seguimiento de lo recaudado.

Finalmente, el esfuerzo dio sus frutos y el Domingo de Ramos de 1944 fue bendecida en el Carmen la imagen de Nuestro Padre Jesús de la Misericordia, obra de Navas Parejo. Fue colocada al pie del altar mayor, con la guardia de la escuadra de gastadores de la Escuela de Especialistas de la Aviación. En el camarín de la Virgen del Carmen se colocó a Nuestra Señoradel Gran Poder; y a ambos lados del altar, los estandartes de la cofradía. Bendecida la imagen se celebró un misa cantada con acompañamiento de orquesta y una lucida capilla vocal. Al terminar la misa, devoto besapié en el que centenares de fieles desfilaron y se arrodillaron ante Jesús de la Misericordia, que había vuelto a El Perchel.

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