El nuevo trono del Resucitado encargado por la Agrupación de Cofradías empezará a ejecutarse en las próximas semanas y con el objetivo puesto en su estreno en la Semana Santa de 2018. Quedan por delante dos años de trabajos, en los que la construcción de esta pieza de arte cofrade permitirá que se generen unos 30 puestos de trabajo, la mayoría de ellos entre los artesanos malagueños.

Estos datos se pusieron de manifiesto el pasado jueves 10 de diciembre cuando los artesanos implicados en el proyecto se reunieron con la Comisión de Culto y Procesión del Resucitado para perfilar los detalles del nuevo trono. Los responsables de llevar adelante el nuevo trono explicaron que la fase de carpintería creará 5 puestos directos, además de los asociados a los proveedores de la madera. El dorado, por su parte, necesitará del trabajo de 6 artesanos de forma directa y 3 indirectos, además de la actividad generada entre los proveedores del pan de oro. La orfebrería generará 3 puestos directos y 4 indirectos; la imaginería un puesto directo y dos indirectos; la policromía generará un puesto directo y otro indirecto; la forja requerirá de 3 empleos directos y diseño artístico, otro más.

Todos los talleres que participarán en la ejecución del trono, salvo el de dorado, están radicados en Málaga, por lo que el efecto positivo en creación de empleo y actividad económica beneficiará fundamentalmente a los artesanos locales.

Sobre la creación de puestos de trabajo que conllevan las restauraciones o las obras artísticas cofrades, el presidente de la Agrupación de Cofradías, Pablo Atencia, animó a los artesanos a que trasciendn la importancia de su actividad empresarial y económica, "ya que la sociedad en general debe saber que el mundo de nuestras Hermandades y Cofradías, como cristianos que somos, también va más allá de lo espiritual generando empleo y colaborando en numerosas acciones sociales. El nuevo trono del Resucitado es un ejemplo más de otros muchos en este sentir".

La nómina de artistas implicados en la ejecución de este trono se abre con Fernando Prini, en calidad de diseñador del trono; al que acompañan el imaginero Juan Vega; el pintor Francisco Naranjo; el orfebre Miguel Ángel Martín (Montenegro); el carpintero Francisco Torrejón; el ebanista Manuel Toledano; y los doradores Manolo Rodríguez y Antonio Moreno.