­Un retrato de grandes dimensiones. Rompedor. Valiente. Sin color, más allá de la tipografía que anuncia las procesiones de 2016. Antonio Cárdenas se atreve con el blanco y negro y con un primer plano de la Virgen del Traspaso y Soledad de Viñeros. De luto, con el rugoso del tiempo en su manto, en su ráfaga, pero sin una sola mancha en su rostro. Es el cartel de la Semana Santa, que la Agrupación de Cofradías presentó anoche en el Teatro Echegaray.

Los cambios introducidos por la nueva junta de gobierno de Pablo Atencia alcanzan también al lugar donde se celebra este acto tradicional en la octava de la Epifanía. Hasta ahora, era el Salón de los Espejos del Ayuntamiento el lugar elegido para descubrir la obra pictórica. El teatro permitió una mayor ceremoniosidad. Pero también se desarrolló de manera más lenta y parsimoniosa. Y contó con una escenografía que en el Ayuntamiento era imposible.

Durante el acto se proyectó un vídeo realizado por Guillermo Morales, sobre el proceso de realización del cartel. Y llegado el momento, el original, escondido hasta entonces entre bambalinas, descendió a la vista del público que llenaba el patio de butacas. Un aplauso recibió a la obra.

Una elección arriesgada. Antonio Garrido Moraga fue el encargado de introducir el cartel del pintor canario afincado en Marbella. Color romé para la leyenda «Málaga. Semana Santa de 2016». Garrido destacó el riesgo asumido por el artista, que en el vídeo proyectado consideraba clave la emoción con que el espectador recibiría su creación. Riesgo en el motivo, renunciando a otros elementos que pudieran identificar a la ciudad. Basta la Soledad de Viñeros, que llama poderosamente la atención, junto con el corazón traspasado en su pecho. Riesgo también en la ausencia de color y en la sobriedad de medios, lo que lo hace un cartel elegante. Y riesgo en el formato. «Modernidad y tradición» en la obra, según el académico.

El acto fue presentado por Santiago Souvirón y en él también intervinieron el presidente de la Agrupación, Pablo Atencia; el vicepresidente de Unicaja, Manuel Atencia; y el alcalde, Francisco de la Torre.