Ha sido un pregón largo. Con dos horas y veinte minutos que dieron para mucho y muchas voces. Antonio Guadamuro ha planteado un pregón con muchas capas, donde se ha escuchado el Himno de Coronación de la Esperanza y el Himno Sinfónico. Pero también varias voces de la Semana Santa de Málaga, como Ana María Flores, Coco, Antonio Garrido Moraga, y de dos pregoneros infantiles como Ana María Serna y Álvaro Van Der Pool.

Llamó la atención la original propuesta de tener a Idigoras y Pachi pintando en directo un cuadro que subastará la Agrupación de Cofradías para fines benéficos.

Sin embargo, Guadamuro ha apostado por llevar también su voz más personal, hilando recuerdos de la Semana Santa vivida, de sus experiencias con su amada radio y de las personas que le han influido.

Guadamuro también incluyó una parte importante de mensajes. La defensa de las cofradías frente al laicismo más agresivo, el valor y la necesidad de la devoción popular, y de la presencia de los militares, con moderación, marcaron varias partes del pregón. Este terminó con dos peticiones. Reclamó al obispo de Málaga, Jesús Catalá, un Sábado Santo que termine antes de la vigilia pascual, y al alcalde, Francisco de la Torre, el monumento al nazareno, que propone que se financie por suscripción popular.