Las puertas de la casa hermandad del Cautivo permanecerán abiertas hasta las dos de la tarde, la hora en la que debería haber terminado el traslado, para que los malagueños puedan visitar a Jesús Cautivo y la Virgen de la Trinidad, que permanecerán hasta entonces en su trono de traslado. Luego, las puertas volverán a cerrarse para vestir a las imágenes y entronizarlas de cara al Lunes Santo y a las siete y media, ya en sus tronos de procesión, recibirán a la Zamarrilla en su traslado.

Tras la misa del alba, en la que no dejó de llover, la Permanente decidió realizar el traslado en una hora, acortándolo al máximo, recorriendo así las calles Jara, Jaboneros, Trinidad, Plaza de Jesús Cautivo y llegar a la casa hermandad. El recorrido ha sido seguido por miles de personas, que han hecho numerosas ofrenda florales y gritado vivas a las imágenes. En poco más de sesenta minutos, en torno a las 9.15 horas, las imágenes habían llegado a su sede, aunque las puertas se cerraron pasadas las diez para vestir a las imágenes, entronizarlas y que pudieran ser visitadas a partir de las siete y media de la tarde, ya en sus tronos de procesión coincidiendo con el traslado de Zamarrila. Sin embargo, la cofradía ha decidido finalmente volver a abrir las puertas hasta las dos, dado que hay miles de devotos que quieren hacer su ofrenda u oración ante las imágenes.