Los primeros datos de la representación de Villanueva de Tapia, que escenifica pasajes de la biblia desde el Pecado Original, - escena única entre los pasos y pasiones de la provincia-, hasta la crucifixión, data de 1927 cuando se constituyó la cofradía de Nuestro Padre Jesús Amarrado a la Columna, época en la que el municipio pertenecía a la provincia de Córdoba.
Villanueva de Tapia en la noche de Navidad de 1896 sufre un terremoto que causa la caída del tejado de la parroquia. Un año mas tarde el sacerdote de entonces, Juan Lama Granados, junto a los vecinos Antonio Altadil, Enrique Zumel y Enrique Pérez Escrich, que eran diestros en la escritura, deciden reformar los pasos existentes introduciendo más escenas y pasajes bíblicos con el propósito de recaudar fondos para la reparación de cubierta de la iglesia. Propósito que consiguieron además de promocionar la representación.
Pero en 1927 desaparece este Paso sin que actualmente “los vecinos a los que hemos preguntado e incluso el propio archivero sepa la causa. Se baraja posibilidad de que el párroco de aquel tiempo fuese trasladado a otro pueblo o porque lo impidiese las circunstancias políticas del momento. Ahora estamos investigando en los archivos de las diócesis de Málaga y Córdoba”, determina Rubén Galeote presidente de la asociación Amigos del Paso de Villa Nueva de Tapia.
Recuperación tras 77 años
Lucio, el archivero del municipio, encontró aquellos textos en verso que, durante décadas y en distintos siglos pertenecieron a una de las representaciones teatrales más significativas de la provincia. No paró hasta juntar a un grupo de vecinos de este pueblo de apenas 1.600 habitantes que trabajaron “en recuperarlo con los textos originales y con todas las escenas que se teatralizaban antes de su desaparición”, relata Galeote. Son unas cuarenta personas desde niños hasta mayores de casi 65 años quienes cada Sábado de Pasión encarnan los personajes del libro más leído de la historia, La Biblia, vistos desde el cristal de Villanueva de Tapia.
Los participantes en este Paso además compaginan el trabajo de su personaje en el Paso con otras tareas de la vida cultural del municipio, por ejemplo, “la banda de música, algún equipo deportivo o portar los tronos en Semana Santa, puesto que nuestro pueblo no tiene una gran población y por tanto hacemos un esfuerzo grande”, precisa Galeote.
El Paso de Villanueva de Tapia se interpreta en la Plaza de España del municipio en distintos espacios escénicos en los que las propias edificaciones, entre ellas la fachada de la iglesia, son el decorado haciéndola muy natural.
Esta recompuesto paso se celebra el sábado de Pasión a las 17.00 horas y a pesar de que no hay entrada sí que disponen de la reserva de sillas a un precio de 2€.
Tradición ancestral
Aunque el Paso desapareció en la tercera década del siglo pasado siempre han conservado las escenificaciones en las procesiones hasta la actualidad. Los llamados rostros, personas vestidas con una careta representativa de uno de los doce apóstoles y un exclusivo atuendo, han continuado “escenificando durante las procesiones, solo con mímica, algunos pasajes de los evangelios”.
En la mañana del Viernes Santo en la procesión de Nuestro Padre Jesús Nazareno y la Virgen de los Dolores, los apóstoles protagonizan una muy antigua tradición con un paso llamado “La carrera de la Virgen”, que figura el encuentro de Jesús y su madre en el Calvario. El trono del Nazareno queda en la plaza rodeado de soldados, el de la Virgen en una calle anexa y el apóstol San Juan, uno de los actores con rostro, va a avisar a la madre que el cristo está en la plaza. Los hombres de trono salen al trote con la Virgen a su encuentro pero los soldados romanos, que custodian al Cristo, le impiden el acceso a la dolorosa. Cada vez que los soldados impiden el encuentro entre los dos titulares, “los portadores de la Virgen retroceden unos treinta metros para volver a iniciar la maniobra, pecho arriba y que al tercer intento termina con el encuentro de los dos tronos”, relata Rubén Galeote. Una costumbre que ha perdurado durante siglos.
