La Virgen de los Remedios recorrió ayer las calles de su feligresía desde la parroquia de los Santos Mártires en una procesión con detalles muy cuidados. Pese a tener un cortejo pequeño, todo está bien dispuesto y con sentido, lo que está logrando que el público, sin ser una procesión de grandes multitudes, vaya creciendo poco a poco y con mucho caminos por delante para seguir ganando en devoción.

La procesión, que salió a las 18.30 horas, consolida una devoción histórica de Málaga que se ha recuperado en los últimos años por el esfuerzo de un grupo de jóvenes y que se ha convertido en una referencia entre las devociones de Gloria.

Por la mañana, se celebró la Función Principal de la hermandad, que comenzó a las 12.30 horas, presidida por la imagen de la Virgen de los Remedios en su trono procesional, situado en el crucero del templo. La misa fue oficiada por el párroco y director espiritual de la hermandad, Felipe Reina, acompañado musicalmente por la Coral Virgen de la Paz, de la hermandad de la Sagrada Cena, dirigida por Santiago J. Otero Vela.

Ya por la tarde, la hermandad lució en la calle uno de sus grandes estrenos, la talla de la peana de la Virgen de los Remedios, obra de Manuel Toledano, además del dorado de los dos arbotantes traseros y el moldurón, que ha realizado Alberto Berdugo. Dentro de las novedades del ajuar de la Virgen, resaltó también el estreno de un pecherín de tisú de plata con bordados del siglo XIX y joyas, confeccionado por Antonio M. Moreno Serrano, que está hecho a juego con el rostrillo estrenado el año anterior.

La imagen de la Virgen, que lleva una estética muy cuidada con numeroso símbolos marianos que refuerzan su mensaje, también procesionó por primera vez dos pequeñas pulseras de plata dorada, aguamarina y perlas, obra del joyero Joaquín Carrasco.

Otros estrenos fueron unas enaguas para el Niño Jesús; los faldones de exposición del trono, faroles de mano para abrir el cortejo; un juego de dos bastones cortos y la restauración del relicario frontal, de origen francés.

Tras recorrer las calles de su feligresía con el acompañamiento de la Unión Musical Maestro Eloy García, el encierro fue en torno a las 22.00 horas.

Procesión en La Palma-Palmilla

La hermandad de la Virgen de la Cabeza, que inició el viernes el triduo en honor de su sagrada titular, lo culminó ayer con la procesión gloriosa. Primero, se celebró la Función Principal de Instituto a las 10.30 horas en la parroquia de Jesús Obrero; mientras que a las 12 horas se inició la Procesión Gloriosa por el barrio de La Palma-Palmilla.

El acompañamiento musical corrió a cargo de la Banda de Música de Zamarrilla acompañando el trono mientras que la Banda de CCTT Santa María de la Victoria abrió el cortejo.