Para que se haga cargo del tipo de entrevista: ¿En el Mustang Ranch había sitio para el amor?

Allí se ha casado mucha gente, clientes que encontraron su media naranja en el Mustang Ranch. Si las chicas podían agarrar a uno, lo enganchaban. También había turistas que venían directamente del aeropuerto a mi casa. Se pasaban cuatro días allí a lo grande, y sin mirar precio. Regresaban a su país sin haber pisado un hotel. A veces ponían la excusa del golf, y repetían cada año.

Si la prostitución tampoco es negocio, ¿qué nos queda?

Era un negocio, pero el Código Penal y la Ley de Extranjería lo han hecho polvo.

Nunca mejor dicho.

Los clientes no venían al Mustang Ranch a pegar un polvo, sino a divertirse. Y como ocurrió con la prohibición de la ley seca, ahora la actividad queda en manos de traficantes y delincuentes. Mallorca era hace diez años Las Vegas de Europa.

Las Vegas de Europa estará en Madrid.

Cuando el empresario de Las Vegas de Madrid lea el Código Penal, no invertirá un duro. El negocio es el juego y la prostitución. Alemania la legaliza tras el Mundial de fútbol de 2006, al darse cuenta del dineral que genera.

El Tribunal Supremo sentenció que, con un contrato laboral, no podía entrar en asuntos de moral.

Pero el calificativo de «camarera» es una tapadera de lo que hace realmente la mujer en el club. El epígrafe «prostituta» o «señorita de compañía» no figura en la Seguridad Social ni en Hacienda. Después la empleada puede decir que la obligas a prostituirse, y estás perdido. Lo lógico es que sean autónomas.

Sería redundante que el Mustang Ranch acabara en manos de un banco.

Acabaré alquilando el Mustang Ranch, pero más de un candidato alemán se echa atrás al conocer la legislación. En su momento fue un buen negocio.

Aclaremos que la prostitución es el abuso sexual de la mujer previo pago.

No, la prostitución es hacer el amor pagando, un negocio como cualquier otro. Hay un tabú porque no está legalizado, pero muchas de mis chicas eran cultas, buena gente. Lo hacían porque no les quedaba más remedio o para ganar dinero rápido.

¿Cuánto ganaba una prostituta?

Mucho dinero.

Dinero que se quedaba su chulo.

Tienen chulo si quieren, hay de todo. Es un asunto de su incumbencia. Precisamente por no ser una actividad legal, carecen de apoyo y han de buscárselo.

¿Tuvo que bajar precios antes de cerrar el Mustang?

En los buenos tiempos, un cliente llegó a gastarse 90.000 euros en una noche. Cuando abrimos, teníamos el Mustang lleno a cien euros, y al final no venía nadie a treinta. La mentalidad de la sociedad ha cambiado, hoy se puede ligar en cualquier discoteca.

En su negocio, las mafias extranjeras han desbancado a las mallorquinas.

Han cerrado un club muy famoso de Alcúdia, ponen multas de hasta cien mil euros. Por lo que yo sé, cogen el relevo búlgaros o rumanos, y el español se retira.

Su familia habrá respirado tranquila tras el cierre del Mustang.

Nunca me aproveché de las chicas. No probé bocado, aunque nadie lo cree. Siempre respeté a las trabajadoras, dentro de mi casa y fuera de ella. Es la única manera de mantener el orden.

¿Cómo resolvía los casos de violencia?

Tuve algún borracho, gajes del oficio. No contrataba gorilas, porque después me tocaba solucionar los problemas que ellos causaban. Me salía más barato invitar a beber al cliente nervioso y tranquilizarlo.

¿Cuál era la suite más solicitada?

Tal vez la Romana, pero todas tenían su encanto.

¿Grabó alguna vez a sus clientes?

Nunca, en el Mustang no se hacían chantajes. El que venía a nuestra casa, estaba en su casa.

Los espectadores no van hoy al Mustang a ver teatro, sino a ver el teatro.

El morbo existe, y están aprovechando el nombre del Mustang, pero los organizadores han montado números un poco picantes y están contentos. Les ha funcionado el boca a boca.

Ahora tendrá que dedicarse a una actividad decente.

En Mallorca hemos escarmentado al cliente y hemos matado la gallina de los huevos de oro, no sólo la prostitución. El poder adquisitivo de los turistas ha bajado.