La Universidad Pompeu Fabra de Barcelona oferta, por primera vez en España, un Grado Abierto. Se trata de una forma flexible de concebir los estudios universitarios que en Estados Unidos, por ejemplo, es mucho más habitual.

Precisamente, el Grado Abierto es una mezcla de dos sistemas universitarios, el estadounidense y el europeo. Toma la flexibilidad del americano, que permite pasar hasta tres años "probando" asignaturas antes de decidir, y evita así la rigidez de los planes de estudios europeos, que obligan a escoger carrera a los 18 años.

Pero hay un matiz: la carga lectiva de las asignaturas, es decir, la profundización en cada materia, será la europea. En parte porque en Estados Unidos la exigencia en cada disciplina es mucho más laxa que la que tenemos en nuestro sistema.

El Grado Abierto empieza el año que viene con 20 plazas. Los alumnos tardarán entre cuatro y cinco años, dependiendo de las asignaturas que escojan el primer curso, en graduarse en la carrera que finalmente elijan.